Lo aseguró Guillermo Nielsen, economista y miembro del equipo económico que negoció con el organismo durante los gobiernos de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner. Además sostuvo que al Gobierno le faltó reacción ante la corrida bancaria.
El economista remarcó la incapacidad del Gobierno para evitar la crisis que se produjo durante los primeros días de mayo, “el fin de semana largo no se usó para laburar y armar un plan fiscal para parar la ola que se venía. Así pasamos el 1 de mayo, que era un día ideal para hacer un anuncio significativo, de peso. Algo que tuviera impacto en el inicio de los mercados cuando pasara el feriado. Siguiendo la cronología de los hechos, en el primer día hábil el Gobierno a través del ministro Nicolás Dujovne anunció algo muy liviano. La ola ya estaba desplegada. Los u$s 3.200 millones de recorte del gasto anunciados por Cambiemos era una cifra insuficiente para lo que son las necesidades argentinas”.
“El Gobierno la precipitó cuando puso la tasa en el 40%. En ese nivel es una cosa exhuberante. Intentó moderarla luego con el anuncio de que va al Fondo Monetario Internacional. En las horas iniciales todos los off the records lanzados por el Gobierno fueron imprecisos y equivocados. Empezaron hablando de un acuerdo suave, un acceso a u$s 30.000 millones sin condicionalidad alguna. Dijeron que se trataban de créditos nuevos. Ahora vamos directamente a un stand by con condicionalidades que no se conocen. Esto quiere decir que los desembolsos del préstamo son de acuerdo a las metas trimestrales establecidas, y que cada dos meses y medio tendremos que recibir una misión auditora”, dijo Nielsen sobre las últimas decisiones económicas del Gobierno.
Respecto al futuro económico, el economista declaró que “hay que esperar. Primero tenemos que llegar a la firma del pacto con el FMI, lo que implica ponerse de acuerdo con el organismo. Es muy importante que Argentina firme lo que pueda cumplir. No hay que firmar cualquier cosa ante el FMI. El Gobierno, el equipo económico, debe tener claro qué va a firmar”.
También indicó que lo más probable es que se realicé un ajuste en la economía. “Por las declaraciones que leo, algunos funcionarios en el Gobierno piensan que seguirá el ritmo de la obra pública. Horacio Rodríguez Larreta -jefe de gobierno porteño- dijo que en Capital no se parará ninguna obra pública ni dejarán de avanzar con las que están en marcha. Eso es no entender dónde está el país ni lo que significa el acuerdo con el FMI. Así pasa también con todos los gobernadores. El FMI no financiará el gasto normal y el gradualismo. Tendremos que adaptarnos a un nuevo nivel de gastos, reducirlo”.