La Policía de Chubut se encuentra investigando el circuito ilegal dedicado al comercio de productos de mar que salen desde Camarones, luego pasan por una planta de procesamiento y luego grandes cargas, sobre todo langostinos, son enviadas a Trelew y al resto del Valle.
De acuerdo a los datos publicados por Diario Jornada, las sospechas se incrementaron luego de que este mes fueran secuestradas cerca de dos toneladas en el marco de seis procedimientos. El último se registró el pasado miércoles donde se incautaron 600 kilos de langostinos, sumados a otros 600 kilos incautados el domingo anterior.
Ante este panorama, las autoridades están alertadas por las condiciones en que son trasladados los cajones con esas especies, que violan el Código Alimentario y la ley de comercialización de productos marítimos.
Por su parte, el jefe de la Comisaría de Camarones, Jorge Calderero, contó en declaraciones a Jornada que hay personas que hacen una cosecha artesanal de moluscos que luego son enviados en camionetas o autos hacia la zona del Valle: “Hay un negocio muy grande, de mucha ganancia. Acá el kilo de langostinos se consigue entre 25 y 35 pesos, mientras que en Puerto Madryn y el Valle se ofrece hasta a 145 pesos. Esto lo vi yo”.
Según Calderero, esas cifras arrojan una ganancia de 40 mil pesos por mes y los dividendos anuales alcanzan al medio millón. Los langostinos se utilizan para preparar comidas en restaurantes, como carnada en concursos de pesca y pescaderías.
En 2014 comenzó el intento de terminar con la ruta ilegal de langostinos. “Desde entonces descubrimos que es difícil frenar esto. Cambian las personas, operan en diferentes horarios y hasta usan distintos vehículos”, sostuvo.
El jefe de la Comisaría de Camarones hizo hincapié en que con esta venta ilegal está en riesgo la salud de la gente, pues no hay nada regulado y asegura que es muy difícil legalizar esta situación.
Tras la seguidilla de secuestros, Calderero explicó que recibió apoyo con llamados de la Asesoría Legal del Gobierno provincial y ofrecimientos de recursos por parte del Estado para continuar con las políticas implementadas desde la Policía.
La ruta del langostino tiene varias formas de llegar al mercado ilegal de Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn y el Valle. Hay tres rutas de escape que cuesta controlar. Se trata de la ruta provincial 1, la ruta nacional 3 y la ruta 30, que empalma con una ruta nacional.