La Cámara de Armadores de Remolcadores, a través de una carta enviada al subsecretario de Comercio Interior, doctor Javier Tizado, expresó su “preocupación” ante el ingreso de 12 remolcadores usados al país, anticipando que esta medida provocará “pérdidas de fuentes de trabajo y desempleo en la industria naval”.
Con la rúbrica del presidente de la entidad, doctor Horacio Falinari, señalaron que dicha importación “ataca el empleo nacional con las consiguientes pérdidas de puestos de trabajo para la industria naval” y es considerada “injusta, dado el compromiso asumido con el Gobierno Nacional de aplicar una fuerte rebaja en las tarifas de los servicios de remolque a partir del mes de septiembre”.
“Nuestra Cámara esta integrada por la casi totalidad de las empresas que se dedican a la actividad de remolque maniobra en todos los puertos argentinos, invirtiendo constantemente en el país y que han incorporado a sus flotas, en los últimos años, remolcadores de alta tecnología que nada tienen que envidiar a los importados, dando trabajo a una industria naval capacitada que tiene todavía mucho por ofrecer”, señalaron.
Esta expresión se suma a la difundida por las Mesa Nacional de Concertación de la Industria Naval, integrada por sectores empresarios, sindicatos, entidades de profesionales y universidades nacionales y privadas, que advirtió al Presidente Macri que ante la llegada de los remolcadores tomará “todas las acciones legítimas y legales a fin de evitar la pérdida de puestos de empleo y el cierre de espacios productivos”.
Los 17 firmantes del escrito, precisaron también que “se dice que tales barcos son de urgente disponibilidad. Quizás sea así y de serlo, bien se podrían alquilar o chartear los mismos mientras se pone una orden de compra y se construyan en Argentina los remolcadores nuevos”.
Señala finalmente que “en los últimos 22 meses dos astilleros privados argentinos construyeron cuatro remolcadores de características similares con tecnología de punta y estarán entregando dos más en el próximo trimestre”.