Desde la ampliación de su pista, el aeropuerto Benjamín Matienzo ocupa el segundo lugar en materia de cargas de la Argentina, sólo superado por Ezeiza. Arándanos, semillas, frutillas, flores, entre otros cultivos vuelan desde el Jardín de la República hacia diversos destinos.
En momentos en que la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) muestra que la demanda de carga aérea medida en FTK (toneladas de carga por km transportadas) aumentó 11,4% respecto al primer semestre de 2016, la reapertura del Benjamín Matienzo permite operar mercadería tucumana y de otras jurisdicciones del país hacia distintos destinos del mundo las 24 horas del día. De esta manera este aeropuerto se convirtió en el segundo en importancia del país, detrás de Ezeiza, reafirmando su perfil exportador.
Las reformas realizadas en el sector de cargas de la aeroestación eran un reclamo que desde hace tiempo sostenían los productores de frutas frescas. La concreción de las obras facilita las operaciones de los aviones que transportan la producción diversos destinos internacionales. En casi una década, la experiencia en la comercialización internacional de los arándanos se han constituido en una verdadera prueba de fuego sobre el potencial exportador local y regional. En ese período, se concretaron cerca de 400 vuelos que transportaron cargas por un total de 16,8 millones de kilos de arándanos. “En los primeros tres años, puede decirse que la experiencia fue como a pulmón. Y ahora observamos que todo se ha profesionalizado”, recuerda Martín Salas, actual presidente de Logísticas Integrales SA, una de las empresas pioneras en esta iniciativa.
“Con las obras que se hicieron este año se va a poder operar mucho más fácil, más simple. Principalmente lo más importante que se hizo para el sector de carga fue la plataforma, exclusiva para vuelos cargueros”, remarcó, al tiempo que señaló que “este año se hizo fue la reforma de la pista, que ahora mide 3,5km y es la pista más larga entre los aeropuertos argentinos. Permite que puedan bajar todo tipo de aviones de carga, hasta los más grandes, sin restricciones”, subrayó.
Tucumán está situada en una posición estratégica del norte argentino, lo que permite que siempre el costo de los fletes aéreos sea más barato que Ezeiza. Esto abre un mercado muy interesante para que se puedan seguir haciendo y creciendo mucho en todo esto que es exportación aérea.
A nivel internacional se espera que los volúmenes de carga sigan creciendo en 2018, aunque a un ritmo más lento que este año. “La demanda de transporte aéreo creció un 5,9% en octubre. Ante la moderación de los volúmenes de carga en el cuarto trimestre, la industria debería ofrecer su mejor desempeño operacional y financiero desde el repunte de la crisis financiera en 2010”, dijo Alexandre De Juniac, consejero delegado de la IATA.
Asimismo, indicó que en Latinoamérica “los FTK crecieron un 7,2% interanual, la capacidad aumentó un 4,4%, los FTK internacionales aumentaron un 7,7% en el mismo período, casi nueve veces la tasa promedio de cinco años de 0,9%. El repunte de la demanda refleja signos de recuperación en la economía más grande de la región, Brasil. Los FTK internacionales ajustado estacionalmente volvieron a niveles de finales de 2014”.
