A pesar de la fuerte caída de la criptomoneda de un 7% en noviembre, todavía hay una oportunidad de que sea valiosa algún día y con nuevos actores en el mapa.
Con el precio del Bitcoin bajando un 80% desde su pico alto el año pasado y el mercado de las criptomonedas en pleno colapso ¿sólo se trata de un sube y baja de esta moneda? No es seguro, pero no se espera ver a los optimistas retirando sus monedas por el momento. El titular de JP Morgan, Jamie Dimon, dijo en septiembre del 2017, que el bitcoin era un fraude y que pronto iba a implosionar. Actualmente, muchos bancos centrales tales como el de Suecia y China, se están dando cuenta que ellas también están preparadas para emitir monedas digitales.
El valor del Bitcoin, que en diciembre de 2012 cotizaba a U$S 13 y que tuvo un pico en junio de 2018 cuando alcanzó a valer U$S 20.000 por 1 Bitcoin, ahora llega aproximadamente a U$S 4.000. Al día de hoy, el bitcoin se recuperó un 0,3%, luego de una caída del 6%. Aunque también se transformó en la moneda donde los inversores se convirtieron en los principales interesados para renovar sus sistemas; para que sus inversores, fondos de cobertura tengan más acceso a la criptomoneda. También países donde el dinero impreso prácticamente ya no se usa como Suecia y China, ya discuten maneras para emitir sus propias monedas digitales.
Giros en el sistema
La red Bitcoin fue lanzada al mundo en el 2009, y su comunidad es manejada principalmente por desarrolladores informáticos, que tienen al Blockchain como tecnología base de su éxito. Ya el año pasado, el grupo se dividió luego de una gran pelea. El grupo saliente creó meses después, otra nueva criptomoneda, Bitcoin cash. Y esta a su vez se separó en dos grupos nuevos: Bitcoin ABC y Bitcoin SV. Esto alteró en parte la idea con la que nación y que tan atractivo hizo al Bitcoin, su escasez: su creador anunció que sólo 21 mil millones de Bitcoins se crearían en total. Pero al haber tantas copias del Bitcoin ¿se crearían 21 mil millones por cada una?
Al ser una moneda tan protegida, es decir encriptada, el Bitcoin también es usada para cometer delitos, tales como la compra de armas ilegales, y drogas en el mercado negro. Aunque nació con la idea de hacer simples las transacciones instantáneas alrededor del mundo, frente a tanta regulación y ‘peaje’ de los bancos, y en países donde la desconfianza en las instituciones bancarias es muy grande.
Pero la creación de otras criptomonedas como OKEx y Tether, que propician una burbuja de criptomonedas como la manía del dot.com en el comienzo del milenio, conlleva a un mayor escrutinio por parte de los gobiernos que aumentará los costos de las plataformas de seguridad de las criptomonedas. Como consecuencia, las Ofertas Iniciales de Moneda que surgieron a partir del boom de las criptomonedas, podrían frenarse al tener que registrarse en la Comisión de Valores e Intercambio de los Estados Unidos.
El Bitcoin, como toda moneda es una convención social, y mientras sus usuarios sigan confiando en ella, todavía puede ser increíblemente valiosa. En tanto, los gobiernos mantengan el interés por regular y administrar las criptomonedas, algo que parece inevitable, (Christine Lagarde, titular del FMI, dijo el octubre pasado,que las criptomonedas podrían mejorar la red de pagos actuales), Bitcoin todavía es como un billete de la fortuna y esto porque como toda moneda, es difícil de anticipar.