La consultora Adecco realizó un estudio sobre cómo impactan los aumentos del transporte público en el trabajador y qué cambios implementaron a partir de los mismos.
Según la investigación, “el colectivo sigue siendo el medio elegido por la mayoría de los argentinos (57%). Sin embargo, comparando con el mismo estudio realizado en octubre del año pasado, aumentó el número de argentinos que eligen ir al trabajo caminando (19% vs. 15%) o en bici (9% vs. 8%), dos opciones que no tienen costo. El subte es elegido por el 17% y el tren por otro 14%, seguido por otros que se inclinan por la moto (8%), tomar un taxi (4%) o ir en combi (2%). Es importante aclarar que muchos argentinos utilizan más de un transporte público para llegar a su trabajo”.
En el trabajo también se refleja que “siete de cada diez argentinos no considera correcto el valor del transporte público, cree que es injusto y se consideran afectados por el mismo”, y agrega que“los trabajadores cada vez gastan un porcentaje mayor de su sueldo para viajar. El 27% gasta aproximadamente un 10% de su salario (vs. 24% del estudio anterior realizado en octubre de 2018), mientras que un 26% gasta el 5%, seguido por el 18% que gasta un 20% y un 11% que gasta el 25% o más. Otro 18% decidió no contestar la pregunta”.
Asimismo, luego de los aumentos en el transporte público, cuatro de cada diez argentinos decidieron cambiar el medio en que viajaban. En octubre del 2018, el promedio era sólo dos de cada diez. Al preguntarles a qué transporte decidieron cambiar por el aumento, el 20% eligió caminar y el 11% la bicicleta, el 12% eligió el colectivo y el 3% el subte.
El impacto del aumento del costo del transporte es afrontado por los trabajadores de los cuales “7 de cada 10 encuestados admiten que no reciben ningún beneficio por parte de las empresas en las que trabajan. Sólo el 13% de los encuestados sostuvo que cuentan con estacionamiento para su vehículo, un 7% tiene bonos adicionales por viáticos y sólo al 2% les brindan servicio de combi o micro”.
También se los consultó respecto al tiempo que demoran en llegar a sus empleos. “El 30% de los encuestados tarda de 30 a 45 minutos, el 24% de 10 a 15 minutos, el 22% de 15 a 20 minutos, el 17% entre 1 hora y 1 hora y media, y sólo el 7% más de 1 hora y media”, explicó el documento.
Cuando se les preguntó si las movilizaciones, huelgas y problemas de tránsito influyeron alguna vez en la pérdida del presentismo, el 24% afirmó que en el lugar en que trabaja no lo pagan, el 38% que nunca lo perdió por estas causas y el 34% cuentan que lo han perdido alguna vez, número que aumentó respecto al mismo estudio realizado el año pasado, en donde sólo el 19% lo había perdido en alguna oportunidad.
En cuanto a qué mejoras deberían realizar al transporte públicos, el 65% mejoraría su frecuencia, el 57% la relación entre el costo y la calidad del servicio, el 34% sumaría aire acondicionado frío/calor a las unidades, el 31% la comodidad y el 17% la simplicidad y la conveniencia de sus recorridos.
La investigación reflejó que el medio de transporte preferido es el auto para el 39% de los encuestados, seguido por el colectivo (14%) y el subte (13%). Para sorpresa de muchos, la bicicleta fue elegida por un 13%, después ir caminando (11%) y el tren (9%).
Respecto a la forma de entretenerse durante el viaje (muchos eligieron más de una opción), más de la mitad escucha música 53%, un 31% utiliza el celular, ya sea para mirar videos, jugar o actualizar las redes sociales. Además, un 15% lee, un 11% elige dormir y sólo el 10% estudia.
Sobre discapacidad y transporte, casi la mitad de los encuestados (49%) cree que el transporte público en el país no es amigable con las personas que sufren alguna discapacidad. En tanto, el 36% admite que algunas formaciones lo son, y sólo el 14% respondió de forma positiva.
El relevamiento fue realizado en febrero de 2019, a nivel nacional y fueron encuestadas 3878 personas.