Durante el período 2000-2012 la intervención de los países en desarrollo en el comercio mundial pasó de 33% a 48% y en el mismo período, la participación de las economías en desarrollo en la producción mundial pasó de 23% a 40%.
La participación de los países en desarrollo en el comercio mundial representa, por primera vez en la historia, casi la mitad de los intercambios globales, señala un informe presentado hoy por la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“El informe muestra el rol cambiante y creciente que las economías en desarrollo tienen en el comercio mundial. La mitad de los intercambios los realizan las economías en desarrollo; y un cuarto de éstos intercambios es comercio Sur-Sur, esto es una gran noticia”, afirmó durante la presentación del informe el director general de la institución, Roberto Azêvedo.
El texto destaca que desde 2000, el PIB per cápita aumentó 4,7% en los países en desarrollo y sólo 0,9% en los países desarrollados.
“Los países en desarrollo son las naciones que más defienden el comercio. Y eso es porque saben el enorme vínculo que hay entre comercio y desarrollo, y como el primero ayuda al segundo”, aseveró Azêvedo.
El informe señala cuatro conclusiones: aparte de la importancia creciente de los países en desarrollo en el comercio mundial; el auge de las cadenas de valor mundiales; la nueva función de las materias primas en las estrategias de desarrollo y la mayor sincronización y globalización de las crisis macroeconómicas.
El texto indica que los países del G20 mostraron un crecimiento de dos cifras en los últimos años, y que la demanda de materias primas -en muchos casos de los propios países emergentes- aumentó los precios de los productos básicos, y por lo tanto ayudó al desarrollo de las naciones que las poseen.
Entre 2000 y 2011 los países en desarrollo aumentaron su participación en las exportaciones agrícolas mundiales de 27% a 36%.
El informe indica también que la fragmentación de la producción mundial se aceleró, y más de la mitad de las exportaciones totales de los países en desarrollo, en términos de valor añadido, están relacionadas con las cadenas de producción mundiales.