La compleja situación que atraviesan los puertos estadounidenses no da respiro y por lo pronto, todo indica que seguirá agravándose. Ni siquiera medidas que adoptaron los responsables de los puertos luego de reunirse con el presidente Joe Biden como la de habilitar las terminales portuarias las 24 horas de los siete días de la semana parecen dar respuestas a los cuellos de botellas que se forman en los ingresos a los muelles de Los Ángeles y Long Beach, ubicados en el estado de California.
Esta situación que comenzó hace aproximadamente un año, se ve agravada hoy con un récord de 80 buques portacontenedores frente a la costa sur de California que aguardan su turno para ingresar al puerto, pero el problema es que más barcos provenientes de Asia llegarían en los próximos días.
Según datos brindados por la Agencia Blomberg, el área de espera frente al puerto de Los Ángeles se ha extendido y alejado de la costa. En total serían 112 los buques que esperan y supera a Singapur como la tercera área del mundo de espera de buques portacontenedores.