Lo afirmó el empresario José Luis Kelly, quien anticipó los alcances de un minucioso trabajo realizado por un grupo de especialistas, donde revela éste y otros datos de la economía argentina.
El ingeniero egresado de la UTN La Plata, es profesor universitario y sostuvo en Ser Industria Radio que “el gasto político injustificado supera en un 15% la deuda externa del país”. Indicó además que “los empresarios PyME perdemos un tiempo brutal, cuando deberíamos estar el 100% abocados a producir, a hacer innovación, a exportar”.
Kelly conduce una constructora, una compañía exportadora de sus propios productos y Mercado del Mundo, una empresa de venta on line. Patentó cuatro inventos en cinco países, entre ellos un disipador de agua que exporta a 15 países y otro que genera agua potable a partir del medio ambiente.
¿Cómo comenzó a emprender?
Nací y crecí en un hogar muy humilde de Berisso, en una familia de trabajadores con mucha disciplina. Puedo decir que esa contención me permite decir que desde la constructora hicimos más de 700 obras y dimos trabajo a más de 2.000 personas. Además, registramos cuatro inventos a nivel internacional. Todo eso nos dio un conocimiento y nos ayudó participar en más de 20 ferias internacionales. Hace más de 15 años exportamos un pequeño producto a 15 países e importamos para nuestros inventos y para una venta on line que tenemos hace años, donde mezclamos un 80% de productos nacionales y el 20 % con otros que no se fabrican acá.
¿Cómo llegó a estos desarrollos desde ese hogar humilde?
El secreto está en la familia, que junto a la educación conforman la base de apoyo para el futuro de toda persona. La familia es una institución que hemos perdido en la Argentina, hace 25 años empezó el declive y eso se ve en todos los niveles sociales. Como fuimos a muchas ferias internacionales, vimos algunos países donde los chicos van 4 horas a la escuela, pero después tienen dos o tres de clase en la casa, con la familia. Lo vimos en Finlandia, en Corea del Sur… Los padres gastan en maestros particulares porque quieren la excelencia de sus hijos. Saben que, si ingresan a la universidad y andan bien, tienen trabajo en empresas serias, de tecnología y se aseguran un futuro bárbaro. El que no tiene ese esfuerzo educativo, se queda en el tiempo.
Estamos en una etapa de estancamiento. ¿De qué manera puede mejorar el país?
Hay que levantarse todos los días, preparados para innovar. Nosotros vendemos un disipador de agua para los goteos de los aires acondicionados. Hace dos años abrimos el mercado a Ucrania y ese país le vendía a Rusia. Batimos récord de ventas y con la guerra pensamos que se había terminado el negocio. Pero decidimos abrir el mercado a Polonia. Investigamos, encontramos un candidato que se interesó por el producto y ya es un nuevo distribuidor. Las comunicaciones globalizan al mundo, están para entenderlas y aprovecharlas, generar contactos, negocios. Pero, además, se debe ser muy serio para trabajar en el comercio internacional. El precio es una variable, pero no es menos importante la confianza. Hoy no somos un país confiable.
Estamos frente a una amplia brecha cambiaria, inflación, desempleo, pobreza… ¿Cómo se recupera nuestra economía?
Para resolver el problema económico, primero hay que terminar con la corrupción y la impunidad. Segundo, tener un estado eficiente, sin gastos innecesarios de los políticos. Tener una educación de primer nivel, un sistema laboral moderno que no sea un problema para el empleado ni para el empleador y seguridad en todos los aspectos, controlar las fronteras, el narcotráfico…entonces se va poder trabajar con tranquilidad. De otra manera, ningún extranjero va a invertir si antes no lo hacemos los argentinos. Pero no están dadas las condiciones desde hace muchos años.
A su juicio, ¿cómo llegamos hasta acá?
Todo lo que tenemos, esta desavenencia de mercado, 30 clases de dólares, es algo inaudito. La primera vez que fui a China, en 2007 el dólar valía 6.8 y su moneda sigue igual al día de hoy. Los empresarios PyME perdemos un tiempo brutal, cuando deberíamos estar el 100% abocados a producir, a hacer innovación, a exportar. No se puede ir un banco con una tasa arriba del 100%, no sé sabe lo que va a pasar la semana que viene… Hace 30 años que juntamos datos… Hicimos un informe donde, a marzo de 2022, Argentina debe 376 mil millones de dólares y desde 1983 a esa fecha la clase política Argentina gastó innecesariamente 432 mil millones de la misma moneda, un 15% más de la deuda externa. ¿Se imagina si ese dinero se hubiera volcado a la producción? Este es un país que tiene que vender galletitas, fideos, no harina y trigo. En China, visité una fábrica de zapatos que llevaba cueros argentinos, 35, en barco. Los bajan en el puerto, luego confeccionan los calzados y vuelven a nuestro país, viajando otros 35 días. Nosotros solamente procesamos el 15 % de los cueros del país. Hay que trabajar en la producción, Argentina tendría que ser el fabricante de zapatos de cuero más grande del mundo. ¿Otros ejemplos? Procesamos el 12% de la lana, el 16% del algodón…
Estamos en un punto crítico. ¿Piensa que el estado ajustará sus gastos?
El estado es como una persona que pesa 400 kilos. Para caminar 100 metros necesita cinco minutos. Tiene que ser atlético, llegar a todos lados, ayudar a la producción…Siempre va a cobrar impuestos, gana más si exportamos productos con valor agregado. Pero faltan ideas. Cuando termina una elección largan obras con 50% de sobreprecios… En cualquier país europeo, los planes de desempleo duran 6, 8 meses, acá 20 años, hay gente que no vio trabajar a los padres… Yo vi a mi padre levantarse a las 5 de la mañana para ir a trabajar, lo tomé como ejemplo, una conducta de vida. Hace quince años, un empresario español me dijo, “¿sabes cuál es el problema de ustedes? Tienen una olla de albóndigas y papas, van comiendo y cuando llega la última se llena de nuevo”. Creo que en este momento nos encontramos sin una albóndiga ni una papa. Tocamos fondo y vamos a agujerear la olla. Acá no hay más plata y no nos cree nadie, entonces como manotazo de ahogado, queremos juntarnos con países que después nos van a traer otro tipo de consecuencias.
¿Podremos recuperarnos en el mediano plazo?
Este es un país maravilloso donde podemos ahorrar 22 mil millones de dólares por año y subirle un 50% a los jubilados, sin cobrarle un impuesto más a nadie. Hicimos un trabajo minucioso y por eso se lo digo. Solamente entre el Congreso Nacional y las legislaturas provinciales, incluyendo la porteña, se llevaron más de 50 mil millones de dólares innecesariamente. Es terrible, pero es lo que pasa. Con el cepo de Cristina Paraguay plantó por un millón de toneladas de soja y vendió por dos millones y medio. ¿Dónde estaban los gobernadores que vieron pasar las ocho barcazas? Llevan el cereal para allá y los paraguayos se quedan con el 25% de lo que producimos, más de 12 mil millones de dólares por año, cuando al FMI hay que pagarle 8 mil. Fui a visitar tres mineras, en San Juan. Los funcionarios son millonarios, tienen empresas, viñedos… ¿De dónde los sacaron? Este es un país inmoral por donde se lo mire.
