Alberto Fernández visitó Y-TEC y recorrió la obra civil de la primera planta argentina de fabricación de celdas y baterías de litio. Lo acompañaron el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus y los presidentes de YPF, Pablo González; Y-TEC, Roberto Salvarezza; CONICET, Ana Franchi y de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Martín López Armengol. La obra civil de la planta, la maquinaria y la producción de materiales de electrodos requirió inversiones por $ 770 millones de los cuales el MINCyT aportó $ 210 millones, mientras que la UNLP e Y-TEC invirtieron $ 280 millones cada uno.
El Presidente aseguró que la “Argentina es la segunda reserva de litio en el mundo por lo que no solamente tenemos que exportarlo, sino también industrializarlo. He visto cómo el mundo reclama el litio como energía y creo que tenemos la oportunidad de brindarlo”.
Sostuvo además que “nuestro potencial se multiplica enormemente si lo industrializamos. El litio tiene un valor muy distinto si se exporta como mineral que, si se lo exporta como batería. Eso no sólo supone fábricas que se montan o trabajo, sino que también supone multiplicar su precio”.
A su turno, Filmus explicó que el litio “es uno de los sectores más importantes para lograr la transición energética. Por eso consideramos que Argentina tiene que ponerse no solo a la cabeza de la extracción sino del agregado de valor. Nuestro objetivo con esta planta, que estará activa a fin de año, no es exportar carbonato de litio sino avanzar en la posibilidad de una tecnología propia que nos permita desarrollar baterías de litio para proyectos de electromovilidad y para abastecer de energía a diferentes lugares como escuelas rurales que no cuentan con energía solar”.
La planta, localizada en el Centro de Transferencia de Tecnología de la UNLP, cuenta con una superficie de 1.300 metros cuadrados y la producción anual será, medida en energía almacenada, de unos 13 MWh, lo que equivale a 1000 baterías para almacenamiento estacionario de energías renovables o unas 50 para colectivos eléctricos. Dispondrá de setenta equipos, algunos de ellos automatizados y creará 50 puestos de trabajo directos. A través de la Escuela de Oficios de la UNLP, ya se capacitó a los operarios y operarias que estarán a cargo de la primera fase de puesta en marcha de la planta y que serán miembros de la carrera de personal de apoyo del CONICET. La puesta en marcha de la producción de celdas está prevista para diciembre del 2022, ya que la fábrica se encuentra finalizada y a la espera de la llegada de los equipos que será en el mes de octubre.
En su alocución, Pablo González afirmó que “con este proyecto tecnológico se desarrolla cómo se puede fabricar la celda, más ese conocimiento que se ha ido incorporando con las provincias productoras, estamos listos para avanzar en seguir creciendo en YPF Litio”.
Luego, Ana Franchi destacó la importancia y el carácter estratégico del proyecto para el país. “Es muy importante que esta tecnología se desarrolle en el país y esté a disposición desde empresas y organismos del Estado Nacional. Esto demuestra que la ciencia, la tecnología y la educación son claramente una inversión hacia el futuro”. En esta línea, agregó que “es estratégico para el país poder sumar este valor agregado a su producción no sólo para atender la demanda interna, sino también para exportar. Hoy tenemos un producto que va a mejorar la calidad de vida de la gente. Esto significa más soberanía científica y tecnológica”.
De la visita participaron el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; la secretaria de Asuntos Estratégicos, Mercedes Marcó del Pont; el Vicepresidente académico de la UNLP, Fernando Tauber; el secretario de Planeamiento UNLP, Agustín Olivieri, la diputada Nacional, Victoria Tolosa Paz y el intendente de Ensenada, Mario Secco.