En los últimos años, hemos sido testigos de una creciente demanda de oficinas modernas y equipadas con tecnología de vanguardia. Las empresas están apostando por oficinas terminadas en 2015 o después, que ofrecen una serie de beneficios y comodidades superiores a los empleados, en comparación con el trabajo desde casa.
Esta tendencia ha experimentado un aumento significativo, lo que demuestra la importancia que se le da a la calidad del entorno laboral y a la implementación de soluciones innovadoras para atraer y retener talento.
Según un estudio realizado por JLL, los edificios de oficinas terminados en 2015 o después en Estados Unidos han experimentado un crecimiento de ocupación neto de 4.9 millones de metros cuadrados desde el inicio de la pandemia.
Este dato contrasta con los 13.7 millones de metros cuadrados de espacio de oficinas que se desocuparon durante el mismo período. Esto demuestra claramente que las empresas están buscando espacios modernos que brinden experiencias laborales superiores y valoren la importancia de un entorno físico de trabajo.
La demanda de oficinas más nuevas está impulsando los precios de los alquileres, ya que estos edificios suelen estar equipados con tecnología de punta y servicios de vanguardia. La tecnología de oficina inteligente se está convirtiendo en una expectativa más que en un lujo. La conexión a Internet ultrarrápida y las salas de reuniones inteligentes se han vuelto indispensables para las empresas que desean ofrecer un entorno de trabajo moderno y eficiente.
La tecnología como factor clave en las oficinas
Antes de la pandemia, muchas empresas se centraban en atraer talento alquilando espacios de oficinas en ubicaciones atractivas, con servicios como gimnasios corporativos, almacenamiento de bicicletas y cafeterías.
Sin embargo, las necesidades han evolucionado y ahora las empresas buscan algo más que comodidades básicas. La implementación de tecnologías como la inteligencia artificial, los softwares inteligentes de consumo de energía y las salas multimedia diseñadas para videollamadas se ha vuelto fundamental. Estas innovaciones están configuradas para hacer que la tecnología de oficina supere lo que los empleados tienen en sus hogares, especialmente en el contexto del aumento del trabajo híbrido.
Ariel Castillo, Director de Tecnología de JLL, destaca la importancia de crear entornos más fluidos y atractivos para que las personas regresen a la oficina. En un mundo donde el trabajo remoto y la flexibilidad son cada vez más populares, las empresas deben ofrecer un argumento sólido para justificar la vuelta a la oficina. Es esencial que el entorno de trabajo proporcione la misma comodidad y estilo de vida que el hogar, integrando tecnologías inteligentes que mejoren la experiencia laboral y fomenten la colaboración.
Valor de la inversión
Las investigaciones recientes de JLL muestran que esta búsqueda de calidad se traduce en grandes inversiones en nuevas construcciones. En la ciudad de Buenos Aires, se espera la incorporación de 283.000 metros cuadrados de nueva superficie de oficinas para los años 2023 y 2024, según el último Reporte de Mercado de Oficinas de JLL.
En este contexto, la tecnología será protagonista y se espera un aumento en las rentas efectivas de los nuevos productos, mientras que los activos de segunda generación requerirán mayores concesiones para mantenerse operativos.
Castillo subraya el valor real de invertir en tecnología inteligente y la infraestructura que la respalda. En un mercado altamente competitivo, aquellos edificios que no se adapten a las demandas y expectativas de los potenciales clientes quedarán rezagados en la lista de opciones.
La inversión en tecnología de vanguardia no solo mejora la experiencia de los empleados, sino que también otorga una ventaja competitiva a las empresas y las posiciona como líderes en el mercado laboral actual.