En 1956, en Saladillo, provincia de Buenos Aires, Augusto “Pirincho” Cicaré detuvo su mirada en la imagen de un helicóptero mientras leía una revista de mecánica popular. En ese instante despertó su pasión por esas naves y comenzó a construir e idear cómo fabricarlo. Dos años después, con los materiales que tenía a su alcance, terminó de construir el Cicaré- CH 1 el primero de su tipo desarrollado y construido en todo el hemisferio sur. Así nació Cicaré Helicópteros.
El reconocido inventor falleció en enero de 2022, pero sus hijos abrazaron la misma pasión y no dudan a la hora de asumir desafíos. Así lograron una certificación en Alemania que abre una gran perspectiva a la empresa familiar, ya que habilita a vender sus helicópteros ultralivianos para ser utilizados con fines comerciales.
Cicaré Helicópteros una empresa que está por el buen camino…
“Podemos decir orgullosamente que estamos en un buen camino”, expresó Juan Manuel Cicaré, presidente de Cicaré Helicópteros, a Ser Industria Radio. Inmediatamente recuerda a su padre quien diseñó, produjo y voló sus propias aeronaves. “Luego el camino se fue allanando para hacerlos en formar comercial y producirlos también para el mundo. Nosotros seguimos con la misma pasión que nació hace más de 60 años, a partir de todo el entusiasmo y la inventiva de mi padre”, agregó.
Te imagino de chico involucrarte con la actividad. ¿Cómo van generando los proyectos en algo tan sofisticado?
En realidad, de los tres hermanos soy el más nuevo en esto y el que menos se metió de inicio en la fábrica: Lo hago desde hace cinco años con la responsabilidad de dirigir la empresa. Es algo que supimos llevar en todo el recorrido con altos y bajos. Hoy podemos decir orgullosamente que estamos en un buen camino. Seguimos con la misma pasión que nació hace más de 60 años, a partir de todo el entusiasmo y la inventiva de mi padre.
¿Qué cantidad de naves constró Cicaré Helicópteros?
Desde saladillo ya llevamos fabricadas más de 120 unidades de las cuales hay mucho en el mercado local y gran parte, diría que casi el 80%, fue exportado.
¿Cuál es el principal uso que le han dado a esos helicópteros?
Localmente es de uso recreativo, traslados para acortar distancias o viajes de un punto a otro productor agropecuario, algún empresario o fanático aeronáutico que quiso conocer y tener un Cicaré. En el exterior, por ejemplo, Australia, tiene algo muy llamativo: el 100% de las unidades se utilizan para trabajar en el campo y arriar ganado. Europa también tiene un mercado muy deportivo y en lo que es ultraliviano para uso personal y recreativo. Pero ahora, a partir de un certificado que tuvimos con el apoyo de varias instituciones, allá mismo de la Asociación Alemana de Vuelo Ultraligero (DULV) y de nuestro distribuidor en Alemania, habilita a introducirnos en el mercado comercial. Significa que se puede hacer lucro, prestar servicio o en esta escuela de vuelo, trabajo aéreo. Tenemos la meta de abrir el mercado y satisfacerlo. Y en el resto del mundo, en la categoría ultralivianos experimentales estamos en más de 25 países de los cinco continentes.
¿Cicaré Helicópteros tiene competidores entre los países de la región?
Somos la única empresa fabricante de helicópteros en Sudamérica y de las pocas en esta categoría del mundo. Continuamente surge alguna u otra se baja porque tienen poco camino recorrido y no logran un producto, no lo pueden afianzar. A nivel mundial en esta categoría, somos unas cinco o seis empresas. El resto son las súper renombradas como las que hacen helicópteros a turbina o el mismo Robinson y demás, pero son de otra escala.
¿Los precios de producir en Argentina son competitivos?
En materiales no. Pero tenemos una mano de obra muy buena, de una calidad increíble. Lo que logramos formar en la línea de Cicaré es excepcional. También es excepcional la calidad de los proveedores Cuando vos localmente llevás a otra provincia o la misma provincia Buenos Aires, proveedores tipo autopartistas o que en algún momento estuvieron dedicados a la aviación por otras cuestiones, es sinceramente llamativo el alto grado de calidad, Tenemos diseño, calidad de mano de obra… Pero no tenemos costos competitivos de materiales. Un helicóptero lleva casi el 80% de material importado, eso te deja bastante poco competitivo. Pero hoy por hoy, con una red de distribuidores en el mundo, hay algunas de esas cuestiones que se pueden lidiar. En el mercado interno por ahí lo competitivo, te lo deja el hecho de que no haya una única moneda. Entonces es algo que puede compararte con tener que importar una máquina completa afuera. Ahí sos competitivo. Pero depende de cómo lo mires, podés llegar a ser caro donde tenés un proveedor que no te cobra un dólar oficial.
¿Cómo están con los insumos?
Tenemos las complicaciones de cualquier PyME que vive de la importación de insumos. Hay cierta complejidad. En pocos años hemos pasado de una DJAI a una SIMI y aun así, ni ahora la famosa SIRA. Algunas no salen… Pero no quiero renegar de eso porque somos muchos los que lo sufrimos esto y me gustaría hablar por todos, no por Cicaré. Es un tema que se está complicando.
¿Sienten que está amenazada la producción?
A tal punto no, pero prende alarmas el hecho de saber que antes tenías un material o cualquier proveeduría externa en menos de un mes y hoy tardan por lo menos tres meses. Tenés que empezar a manejar de otra manera todo ese circuito y cuando te salen, por supuesto, los permisos de importación. Es tedioso, pero hoy no es crítico.
¿Cómo calificás esta exportación a Alemania?
Nosotros hace más de diez años que estamos exportando máquinas al mercado europeo. Va a ser el primer ultraliviano certificado que va a Alemania. Porque va de la mano de una certificación que obtuvimos a fin del año 2022, un trabajo muy muy grande que hizo a la cabeza mi padre con el grupo de ingeniería de la empresa y con apoyo por ejemplo de la facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) entre otras instituciones locales. Después de un largo y demandante trabajo se pudo tener el certificado que es el único en 600 kilos en el mundo. Alemania no solamente nos otorgó esto como a la única empresa exterior del país, sino que es única en la categoría de tipo completo de 600 kilos.
¿Esto da expectativas de llegar con el mismo producto a otros países?
En principio no. Sí con Alemania, pero es suficiente para entrar en el mercado comercial de Alemania, que es muy rico, muy bueno y requiere que la máquina que usen sea certificada para dar instrucción, prestar trabajo aéreo y lo que comenté.
¿Qué tiene proyectado Cicaré Helicópteros para el resto del año y el 2024? ¿Hay algún desafío?
Sí. En cuanto a lo productivo de serie, yo le llamo de serie a los productos que tenemos en línea ya hace unos diez años por lo menos, es afianzarlos. Ahora más que nada apuntar a esto de la certificación del biplaza lado a lado del Cicaré 8, porque eso conlleva procesos que hay que certificar puertas adentro de nuestra empresa. La meta es lograr la excelencia en ese camino y seguir produciendo y colocando en el mundo el producto único que es el invento de mi padre, el entrenador de vuelo el SVH 4.
Es bueno escuchar que, a pesar de la compleja macroeconomía y otras dificultades, muchos PyMEs como ustedes siguen proyectando aun cuando pareciera que van contra viento y marea…
Sí, es contra viento y marea, voy a afianzar ese comentario. Claro que se puede, siempre con las bases de tener un buen equipo de trabajo, que crea en uno, hacia donde va. Porque uno es el que quiere poner el faro un poco más más lejos. Y te das vuelta y te preguntan ¿estás seguro? O ¿cómo se hace? Pero bueno, es así, se puede, se tiene que poder o sea de alguna manera creo que tenemos que salir adelante. No hablemos de lo que no tenemos, no hablemos de las trabas. Hablemos de todo lo otro, lo que está. Creo que hay que trabajar eso.
