En un mundo cada vez más globalizado, las empresas se enfrentan constantemente a desafíos ante la crisis del comercio exterior. Sin embargo, cuando surgen situaciones de crisis económica, como restricciones cambiarias, inestabilidad financiera y diferentes medidas restrictivas, contar con buenas estrategias de comercio exterior se vuelve aún más crucial.
Un ejemplo destacado de empresa que demostró la importancia de contar con sólidas estrategias de comercio exterior es Puratos Argentina, una filial de la multinacional belga Puratos.
Especializada en proveer insumos, tecnología y conocimientos a la industria del chocolate, la repostería y la panificación, logra sobrellevar con éxito las dificultades impuestas por el contexto económico argentino, gracias a su enfoque estratégico y proactivo.
Comunicación efectiva
Una de las principales acciones implementadas por la firma, con más de 40 años de presencia en la Argentina, fue la comunicación constante y efectiva. Gabriel Galarza, jefe de compras de la compañía a nivel de Argentina, Paraguay y Uruguay (APU), destacó la importancia de comunicar a todos los equipos internos los cambios normativos y su impacto en la operación.
Esto incluye informar a los vendedores sobre cómo dichos cambios pueden afectar a los clientes y al departamento financiero respecto a su impacto en el flujo de caja. Además, Puratos buscó establecer una comunicación bidireccional, acercándose a socios proveedores y expertos en el tema para obtener información anticipada y compartirla con la organización.
“En medio del caos y la incertidumbre, mantener la calma y el orden se convierte en una necesidad para las empresas. Hemos comprendido esta premisa y trabajamos arduamente para mantener una imagen de solidez y confianza ante nuestros clientes y proveedores. Esta estrategia fue fundamental para el mantenimiento de un negocio virtuoso, incluso en situaciones de crisis”, sostiene Galarza.
Agrega que “es estar en la punta de un barco en una tormenta y no ver nada para adelante. Es manejar en la niebla. Y creo que el principal efecto de la incertidumbre, es la angustia. Nosotros, ante una corrida cambiaria o una corrida inflacionaria, de repente nos convertimos en psicólogos de nuestros proveedores y en administradores de la ansiedad. Es, además, una buena oportunidad para mostrarles que nosotros no somos solamente un cliente para ellos, tenemos que ser un socio en el negocio”.
Participación activa
Otra estrategia clave implementada por Puratos Argentina fue su participación activa en las conversaciones entre sus principales clientes industriales y el Gobierno. Esta colaboración le permitió asegurar la cadena de abastecimiento, un aspecto vital en tiempos de restricciones y dificultades para obtener las licencias de importación.
“Los desafíos se renuevan cada día, pero a grandes rasgos hoy el gran desafío es asegurar el abastecimiento de nuestros clientes. Las complicaciones para obtener las licencias de importación se han dilatado en el tiempo desde marzo pasado y hoy sus consecuencias son generalizadas, pudiendo verse en todo el mercado. Como resultado, al aumento de precios, esta vez por escasez, se suman grandes baches en el abastecimiento. Al mismo tiempo, y estrechamente relacionado a esto, alcanzar niveles eficientes de producción es cada vez más complejo de lograr”, relata el ejecutivo.
Galarza destaca que, a pesar de las turbulencias económicas, Puratos siguió abasteciendo a sus clientes con productos de la más alta calidad. En un contexto en el que tener las líneas de producción en funcionamiento es un logro en sí mismo, la empresa se enorgullece de su capacidad para cumplir con las demandas de sus clientes.
En términos de métricas, Puratos Argentina logró reducir los costos ocultos de las importaciones mediante ajustes operativos. Estos ajustes incluyeron el cambio de gran parte de los agentes del comercio exterior de la empresa, lo que resultó en una operación mucho más eficiente, incluso en un contexto económico desafiante.
Pooles de compra para combatir la crisis del comercio exterior
El conflicto, el Covid 19 y el clima han sido, cada uno a su turno y combinados por acumulación, una tormenta perfecta para las cadenas de suministro globales. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la propagación rápida del virus, con su secuela de parate productivo y cierre de fronteras, hizo que el volumen del comercio de bienes cayera un 17,7% en mayo de 2020 en comparación con el mismo mes del año anterior.
Además, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, que comenzó en febrero de 2022, generó problemas de abastecimiento en las cadenas de valor, incremento en los precios de commodities agrícolas, combustibles, minerales y fertilizantes, aumento en el costo del transporte internacional y aceleración en las tasas de inflación global.
En este contexto, la estrategia de Puratos de crecer con plantas de producción locales se convirtió en una ventaja significativa para surfear las adversidades del contexto.
Tanto el contexto global como las especificidades de los mercados locales están siendo una oportunidad para que las empresas reconsideren sus estrategias e inviertan en tecnologías. Puratos, por ejemplo, se abocó a desarrollar su departamento de comercio exterior mediante capacitaciones y la aplicación de la inteligencia artificial.
“El objetivo es optimizar el trabajo operativo y de bajo valor agregado, lo que nos permite agilizar los procesos y mejorar la eficiencia en las operaciones comerciales”, explica Florencia Motta, gerente de Operaciones en Argentina, Paraguay y Uruguay (APU), de cuya área depende Compras.
Además, Puratos está trabajando en la creación de pooles de compra en toda la región de Sudamérica y el Caribe. Estos pooles implican la consolidación de las demandas de varios países, lo que fortalecerá el poder de negociación de la empresa en el continente. A