El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de La Plata, Federico Melia, remarcó la importancia de que las entidades empresarias trabajen en conjunto para darle más fuerza a sus reclamos.
En su visita a Ser Industria Radio, el empresario consideró que el comercio de la región está luchando por mantenerse a flote. A pesar de las medidas estatales, la inflación impide un crecimiento sostenido del sector. Asimismo, señaló la necesidad de una colaboración más estrecha entre el sector público y privado para lograr un progreso efectivo.
Además, Melia, que tiene mandato hasta julio de 2025, abordó diversos temas, como la complejidad de la relación con los sectores informales y la importancia de medidas como una reforma impositiva y laboral para impulsar el desarrollo económico.
¿Cómo está el comercio en la región?
Desde nuestra perspectiva el comercio la viene luchando. Si bien hay diversas medidas por parte del Estado, la inflación no está permitiendo un crecimiento del sector, eso desde lo que es perspectiva económica. En segundo término, desde lo territorial, tampoco está muy desarrollado. Son como diversos centros que han crecido a pulmón, pero no hay una intervención o una cohesión entre el sector privado y el sector público para que esto se pueda desarrollar correctamente, no solo los propios centros comerciales. sino la ciudad en general.
¿Es un divorcio que lleva tiempo?
Lleva mucho tiempo. También hay una corresponsabilidad de parte de los dirigentes empresariales en esto de no ir de la mano, de no estar juntos y reclamar unidos para ordenar, presentar las ideas y ser escuchados. Si vamos totalmente diversificados las respuestas van a ser varias.
Con la inflación actual, el cliente cuando va a un comercio se enoja con el comerciante por los aumentos de precios…
Eso es normal. El comerciante no cobra un sueldo, entonces tiene que estar previendo, cómo van a impactar los impuestos, las paritarias del sector, cómo se van a incrementar los costos, las mismas compras de los bienes que vende. Todo eso el consumidor no lo ve y es parte del riesgo empresario, pero el precio es para que esto siga rodando y proteger su emprendimiento.
¿El alquiler es otro factor?
Sí. La nueva ley de alquileres, de alguna manera permite tener una pauta un poquito más clara y tener la posibilidad de rescindir o volver a conversar. Volvemos a la vieja teoría del esfuerzo compartido. Me parece que puede ser una punta para empezar a mejorar y tener un panorama más previsible. No es que tenga todas las luces y que esté totalmente de acuerdo con la ley, pero creo que es mejor que lo que teníamos.
¿Faltan productos en los comercios?
La verdad que se ve a nivel general una decisión de querer conservar el stock, justamente por no tener la certeza de si se pueden volver a conseguir los mismos productos. El comerciante lo que hace es retener, pero lo hace para protegerse. Vende un poco, otro poco lo sostiene, pero también no es que hace él solo, sino que ya viene de una cadena hacia atrás que no le está vendiendo o que directamente no le están dando precios. El comerciante no es el culpable de esto.
¿Se están cerrando locales?
No he visto un cierre, pero bajan las ventas y eso se ha notado. El Día de la Madre, en relación a 2022, hubo una baja sensible en cuanto a las ventas. Esto se está viendo. Se están vendiendo en cuanto a valor económico más o menos parecido a periodos anteriores, pero en menor cantidad de unidades.
¿Ven una reacción por parte de la política ante esta situación?
No. Las reacciones han sido herramientas generales como los beneficios que te pueden dar desde el sector financiero como los de Cuenta DNI del Banco Provincia, pero no mucho más. Son las mismas tesituras con las que se maneja el gobierno, no sale de ahí. Son medidas generales más para atender al consumidor que para darle una mano al comerciante. Tiene que venir de parte del sector empresarial consolidado la exigencia de medidas claras. No puede ir un sector del comercio a pedir una cosa, otro a pedir otra… Debe haber consensos básicos en los que haya un acuerdo y eso tratar de consensuarse con quienes gobiernan.
¿Cuando hablas de distintos sectores te referís a la diversidad de agrupaciones de comerciantes que existen en La Plata?
Exactamente. Entiendo que hay sectores que defienden una calle o un centro comercial y quieren cuestiones diferenciales. Me parece válido porque están instalados en determinadas zonas, tienen determinadas marcas y público. Es lógico que así lo exijan, pero detrás de eso hay medidas generales que nos abarcan a todos y es ahí donde por lo menos hasta hace poco no había un consenso para plantear nuestras necesidades a las autoridades. A partir de un encuentro que hicimos el 27 de septiembre pasado en el Hotel Grand Brizo pudimos, con muchísimas asociaciones, establecer las primeras pautas para empezar a reunirnos entre todas las entidades y fijar este piso mínimo para exigir a las autoridades.
¿Cómo están en relación a la competencia que antes se limitaba a los manteros y se extendió a organizaciones que se instalan en las plazas para vender ropa u otros productos?
No avalamos ni acompañamos la venta ilegal o clandestina, estamos en contra de ello. Lo que pasa es que también hemos visto a lo largo del tiempo cómo se los ha querido combatir. Tampoco acompañamos que vaya Control Urbano y los saque de prepo, los empuje. No podemos dejar de ver que hay gente que necesita trabajo, que está requiriendo de algún modo insertarse laboralmente. Por otro lado, desde la perspectiva empresarial hay todo un movimiento económico que no lo está viendo el sector formal. La habilidad en todo esto está justamente en incluir a esta gente. La mano del Estado no puede llegar en este punto, no se puede ocupar el secretario de comercio local, a lo sumo podrá consensuar con nosotros o con otras entidades cómo hacer un relevamiento general de cuántos puestos, dónde están, qué es lo que venden. Después para mejorar esto hay que hacerlo desde la óptica empresarial, ver qué rubro hacen, que productos pueden vender y empezar a formalizarlos. Es un sector a incluir, pero con medidas no solo audaces sino inteligentes y no únicamente con la mano del Estado sino también con el acompañamiento empresario y su know how.
Este es un fenómeno que se extiende por todo el país…
Es lamentable tener el comercio abierto y los manteros en la puerta, llegar a la plaza y tenerla cubierta de reventas que tampoco son claras en qué condiciones se encuentran, si están empadronadas, si pagan algún tipo de canon… No es justo que el que tiene un emprendimiento gastronómico por tener mesas en la vereda pague un canon adicional y el que ocupa un espacio público no lo pague.
En nuestra ciudad se observa que llegan personas desde otros lados. También queda claro que es probable que no tengan otra forma de vivir. ¿Hay que buscar un equilibrio?
Justamente, no solo hay que ver si son o no locales, de dónde proviene la mercadería, a quién estamos favoreciendo con esto. Son esas cuestiones donde hay que indagar. Estamos comenzando junto con la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata a realizar informes en cuanto a los circuitos e índices económicos que hay en la región. Pero además queremos dar un paso más en las colaboraciones y los que quieran participar están invitados, para empezar a hacer muestras de cuánta gente tenemos en las plazas, censar todo esto. Eso va a poder mostrar en qué situación estamos y qué medidas podemos tomar. Hay algunos registros que existen en la Municipalidad, pero la verdad se debería hacer a lo largo y a lo ancho de la ciudad.
¿Hay diálogo con esos sectores informales o un enfrentamiento?
No tiene que ser en perspectiva de enfrentamiento. Tiene que ser en términos de inclusión. Podemos armar ferias, pero que estén reguladas, reglamentadas y formalizadas. Ahí toma otro color y ya no hay competencia desleal.
¿Para eso es necesaria una reforma impositiva y laboral?
Sí, una reforma desde el punto de vista tributario tiene que haber. Tenemos el índice más alto de impuesto de, por lo menos, Sudamérica, no podemos seguir tributando de esta manera, que ahoga al empresario y no le permite crecer. La única fuente genuina de empleo es el privado. Esa reforma tiene que existir. Desde lo laboral también tenemos una norma general del año 72, que estaba pensada de una manera y se aplica desde una industria de miles de personas a un comercio que tiene dos empleados. Se puede ser más específico y atender un montón de situaciones. También es necesaria una reforma laboral.
¿Políticamente está dado el contexto para avanzar en esto?
Se tiene que dar. Se viene ya de tantos años de charlas…Pero me parece que, si el sector privado no va unificado a exigir esto, de vuelta va a caer dentro del colador y se va a diversificar. Por eso, la virtud va a ser exigir desde el sector privado junto y no separados.
En los últimos meses. el gobierno nacional inyectó mucho dinero en el trabajador estatal, en los jubilados… ¿Esto se reflejó en el consumo?
Si, lo vimos reflejado. Todas esas herramientas han ayudado a que el comercio mantenga un nivel de ventas. No es una cuestión política. También hay algo que el comerciante deja por vender, pero es parte de la regla. No creo que sea fácil dejar de un momento a otro estas herramientas, se tienen que mantener y perfeccionar, no nos podemos quedar siempre con los mismos programas. Fomentar el consumo está en eso, en traer nuevas ideas para que el consumidor pueda explorarlas.
Pero esto impacta en la inflación…
Sí, alimenta la inflación. Lo que pasa es que, si se logra una estabilización de algunos precios, fundamentalmente de la canasta básica, después lo demás se puede armonizar y estas herramientas pueden funcionar. Lo vimos a lo largo del tiempo, pero de todas maneras hay que mejorarlas.
Se describe a La Plata como una ciudad administrativa, universitaria. ¿Cómo ves el desarrollo industrial de la región?
Sí, así se ve a La Plata, pero los índices económicos muestran que tiene una actividad económica e industrial muy fuerte a nivel provincial. Lo demuestran los informes que estamos produciendo trimestralmente. Con el cordón frutihortícola que tenemos, siendo un país con esta matriz alimentaria y de materias primas, el industrial tendría que buscar la punta ahí. La única fábrica de disecados la tiene la Universidad Nacional de La Plata, que la pegó al lado mismo del cordón frutihortícola. Allí secan tomates y hortalizas. Tanto valor agregado le podemos poner a todos a toda esa materia prima que se podría vender de otra manera. Sin dejar lo que hay, tenemos la posibilidad de proyectarnos en lo alimentario porque es lo que tenemos de base. El cambio en la matriz tiene que venir por ahí.
¿Cómo es la relación con el sindicato de Comercio?
Es buena. No tenemos inconvenientes. Últimamente no hemos tenido muchas reuniones, pero es una relación cordial.
¿Cómo impacta la venta online en los comerciantes?
Es un cambio de paradigma que se ha acentuado con la pandemia y llegó para instalarse. El comerciante ha mutado porque tiene la posibilidad de vender online y no se ha quedado atrás. La gran mayoría se ha especializado, hizo cursos de comercio electrónico y ha avanzó en este sentido. Es una herramienta que tienen que usar y el que no ve esto tiende a desaparecer porque no se aggiorna a lo que viene pasando en la sociedad. No creo que tenga una connotación negativa, sino que auspicia la transformación del comercio.
¿Para cambiar la matriz productiva de la ciudad es necesario trabajar junto a las Cámaras de los municipios cercanos?
Sí. Estamos en contacto a través de la Confederación Económica, con Chascomús, Brandsen… Naturalmente Berisso y Ensenada por la existencia del puerto. Tenemos buena relación. Como presidente de la Cámara de Comercio La Plata, considero que tenemos que empezar ordenando nuestra casa. No podemos alinearnos con los demás partidos, en cuanto a lo que es una perspectiva industrial, un ordenamiento logístico, si no empezamos por acá. Tenemos que empezar por lo básico, si no van a ser todos impulsos espasmódicos que van a tener un resultado de corto alcance y no general que beneficie a futuro. Tiene que haber una visión integral. Existe la idea de aunar todos los partidos, pero empecemos por casa.
Hay por delante una vasta tarea. ¿Te acompaña un buen equipo?
Si, cuento con un directorio muy amplio, conformado por más de 50 empresarios. Además, contamos con un Consejo Ejecutivo de siete miembros, con quienes tomamos decisiones a diario. Con estos recursos, avanzamos en nuestras actividades.
¿Las problemáticas del resto de la Provincia son similares a las locales?
Son de otro tipo, muy trazadas con lo político… Pero tenemos una visión con ellos, no sólo a través de FEBA, sino de la Confederación Económica. Participamos al igual en las dos entidades, no tenemos ningún tipo de oposición, ni de enfrentamiento. Tenemos muy buena relación. También participamos de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios y de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa. Acompañamos las políticas que se vienen implementando desde las entidades. Últimamente, tanto las entidades nacionales como las provinciales, empezaron a transitar más juntas y es un ejemplo de lo que tenemos que hacer localmente.
Se acerca la Navidad, fecha clave para el comerciante. ¿Esperan vender mucho?
Diciembre es un mes crucial, el momento más significativo del año para los comerciantes. Como es nuestra tradición desde hace muchos años, vamos a auspiciar la Gala de Vidrieras. Convocamos a todos los comercios, como siempre, para que puedan embellecer sus negocios. Esta actividad la realizamos en colaboración con la Facultad de Bellas Artes, que cuenta con expertos especializados en el diseño y decoración de vidrieras. Esperamos que las ventas sean buenas.
