La justicia penal de San Juan dispuso ayer extender la suspensión de actividades que utilicen cianuro por parte de la empresa Barrick en la mina Veladero, donde hace una semana se produjo una fuga de una solución cianurada. El gobierno sostuvo que el derrame fue “un accidente”, advirtió que la compañía no podrá volver a operar hasta que cumpla con las medidas de seguridad solicitadas y confirmó que no hay cianuro en el agua.
El fiscal Federico Delgado impulsó una causa contra la empresa y los gobiernos nacional y de San Juan para determinar si “cometieron los delitos de envenenamiento de aguas, propagación de enfermedades peligrosas e incumplimiento de los deberes de funcionario público”. “Esto ha sido un accidente, es lógico que pueda ocurrir y por eso el gobierno realizó una denuncia”, dijo el ministro de Minería provincial, Felipe Saavedra.