El comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, sostuvo que el falseamiento de datos de la empresa alemana ha sido un golpe que no sólo afectó a la compañía sino que suscitó dudas más allá de ella.
Moscovici, al participar de un congreso organizado por el Ministerio de Economía alemán, sostuvo que la crisis “ha sido muy importante” y que la empresa sufrió un claro daño de imagen.
Ante el falseamiento de los valores de emisión de óxido de nitrógeno en sus motores diésel, el comisario manifestó que está en permanente contacto con las autoridades estadounidenses para “saber qué pasó” para que no suceda otra vez, y agregó que “la transparencia es clave”.
El grupo Volkswagen admitió que fueron vendidos 11 millones de autos con los datos falseados, de los cuales 2,8 millones fueron vendidos en Alemania y dos millones son marca Audi.
Su nuevo presidente, Matthias Müller, que asumió tras la renuncia de Martin Winterkorn, aseguró en una carta a los 600.000 empleados con los que cuenta VW en el mundo, que este asunto quedará debidamente aclarado.
Por último, el grupo anunció que prevé reparar en breve y de forma gratuita esta manipulación en todos los vehículos diésel afectados, comercializados a lo largo de varios años en numerosos países.