El jueves ingresó a Bariloche la esperada formación del tren proveniente de Constitución, que unió Buenos Aires con la Patagonia.
El tren que une Bariloche con Buenos Aires volvió a circular. El arribo de la formación desde Constitución a la ciudad patagónica, se realizó modo de prueba, con el objetivo de constatar el estado de las vías en los tramos Bahía Blanca- Carmen de Patagones y Viedma- Bariloche.
Un centenar de personas presenciaron el ingreso de la formación construida en China, compuesta por 11 vagones. Se trata de un hecho histórico para la ciudad. Hacía 18 años que el tren no unía Buenos Aires y Bariloche, luego del desguace y las privatizaciones de los ’90.
Si bien debe mejorarse el estado de las vías “del lado de Bahía Blanca” explicó el ministro de Servicio y Obras Públicas de la Provincia, Fernando Vaca Narvaja, desde el Municipio se pidió que “para el verano el servicio esté en funcionamiento”, según confió la intendenta, María Eugenia Martini.
Ese es también el objetivo transparentado por Vaca Narvaja y el Gobierno rionegrino. De cumplimentarse la solicitud de la Jefa Comunal, permitiría volver a unir Bariloche con Buenos Aires, tras 18 años. La línea del ex ferrocarril Roca había sido cerrada durante las privatizaciones menemistas.
“Es emocionante, habíamos perdido el tren con la política neoliberal. Este es un camino muy profundo que hay que reconocerle a la Presidenta, al ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y al área de la Subsecretaría de Transporte Ferroviario de Nación”, expresó Vaca Narvaja.
A bordo del tren viajó una delegación de técnicos de la empresa China North Locomotive and Rolling Stock Industry Corporation, fabricante de los once coches, dos camarotes y nueve pullman, un furgón y una locomotora 319 -similar a la que ya posee el Tren Patagónico-; además de funcionarios provinciales, la Intendenta de Bariloche e invitados especiales. El viaje constituye una prueba fundamental para definir si es posible reeditar la línea que fue cerrada en 1995, en pleno proceso de ajuste y privatizaciones.
Uno de los técnicos que constató el funcionamiento de la formación explicó que “lo que limita el tiempo de los viajes es el estado de las vías”. Explicó que calculan que “en unos 4 meses de trabajo en etapas, podría restablecerse el servicio”.
Afirmó que por el estado del tren, podría alcanzar los 120 kilómetros por hora de velocidad, lo que acortaría notablemente los tiempos de los viajes. Subrayó que el tramo “más complicado en su estado es la salida de Bahía Blanca, unos 70 kilómetros”.
Planteó en una misma línea que renovar las vías “es imposible”, pero aseguró que se debe tener “una mirada optimista del tema, y trabajo en etapas”, insistió.
La inversión para la realización de esta prueba piloto corrió por cuenta del Gobierno central, en el marco de un plan nacional de recuperación del ferrocarril, articulado con la Provincia.
“El tren es una maravilla”, resumió emocionada Martini, quien se sumó a las celebraciones por el regreso del mítico servicio