La Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA) advirtió que la eliminación del Certificado de Importación de Bienes Usados (CIBU) y la posibilidad del “ingreso irrestricto de maquinaria agrícola usada representa una amenaza directa para la cadena de valor industrial nacional y el entramado productivo federal”.
“La ruptura de las dinámicas comerciales genera un riesgo para el crecimiento y la continuidad de la generación de puestos de trabajo y oportunidades de desarrollo personal”, agregó la entidad.
Asimismo, recordó que “esta herramienta durante tres décadas reguló la entrada de este tipo de bienes al mercado local”. CAFMA considera que la vigencia del DNU 273/25 “no responde a una política de renovación tecnológica del parque de maquinaria agrícola, debido a que la tendencia se vuelca hacia la importación de maquinaria ya amortizada en otros mercados”, sino que “responde únicamente al interés de mercados extranjeros por colocar su sobrestock de usados“.
“Si el objetivo es fomentar la producción y el desarrollo nacional, el eje del debate debe centrarse en la mejora de la competitividad como una construcción colectiva, contemplando el impacto del régimen impositivo y regulatorio vigente. En un contexto global donde las naciones promueven el fortalecimiento de sus estructuras productivas, la consolidación de cadenas de abastecimiento cortas y el impulso a vectores nacionales de desarrollo, esta medida reemplaza el valor agregado, la innovación y el trabajo argentino por el descarte extranjero“, manifestó la entidad.
Origen del CIBU
Las primeras estimaciones refieren que los precios que se manejan en estas operaciones pueden llegar a ser entre un 40% y 50% inferiores a los de la maquinaria nueva.
Lógicamente, los industriales no ocultan su “profunda preocupación” por las consecuencias del DNU y aseguran que el verdadero desafío está en mejorar la competitividad mediante políticas que contemplen una mejora del régimen impositivo y regulatorio vigente, en lugar de abrir las fronteras.

Al repasar el origen del CIBU, indicaron que fue creado mediante la Resolución 909 de 1994 del ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos, en el marco de un proceso de desregulación y apertura de la economía argentina. Esa regulación fijaba un entramado de trámites que incluía a la secretaría de Comercio, la industria nacional y los importadores.
“Lejos de constituir una barrera al comercio exterior, el CIBU surgió como una herramienta necesaria para acompañar una apertura económica ordenada, basada en reglas claras y transparentes, que eviten distorsiones en los mercados y desarrollaran la producción nacional”, observaron.
AFAMAC
En el mismo sentido, la Asociación de Fabricantes de Maquinaria Agrícola y Agrocomponentes de Córdoba (AFAMAC) pidió una “integración inteligente al mundo” y señaló que “los principales obstáculos para mejorar la competitividad son la inestabilidad macroeconómica, la presión impositiva, el alto costo laboral no salarial, la falta de financiamiento y los costos logísticos”.
“A pesar de avances en algunos de estos puntos desde diciembre de 2023, todavía existe una brecha del 25% en los costos respecto a los principales competidores, agravada por la persistencia de las retenciones al campo”, concluye el texto emitido por los cordobeses.