El país asiático advirtió a la Unión Europea (UE) que habrá un grave conflicto comercial si el bloque no reconoce oficialmente al gigante asiático como economía de mercado.
Las relaciones económicas y comerciales podrían verse dañadas si la UE sigue negándose a reconocer este estatus a China, escribió hoy en un editorial la agencia oficial Xinhua.
“El peor escenario sería una guerra comercial”, indicó Xinhua, que aclaró que “el precio podría ser demasiado alto” porque cada una de las partes es un importante mercado exportador para la otra.
El otorgamiento del título de economía de mercado protegería a China de las costosas demandas antidumping, las acusaciones de que vende sus productos por debajo del coste de mercado.
En la actualidad el país y la UE se encuentran enfrentados por el tema del acero: Se acusa a Beijing de vender el acero barato debido a su exceso de producción.
El comentario coincide con un informe de la Cámara de Comercio Europea en China que apunta que el clima entre las empresas de la UE en el país asiático es más negativo que nunca.
El pesimismo “alcanzó un nuevo récord”, se indica en una encuesta publicada en Beijing hoy, en la que 15% de las firmas consultadas ven de manera negativa sus posibilidades de crecimiento en China.
Hace un año este valor era de 8%; y la cifra de los que ven el futuro con optimismo es de 44%, la mitad de los valores de 2011.
China alega que en el acuerdo para su entrada en la Organización Mundial de Comercio (OMC) en 2001 se establecía que 15 años más tarde, plazo que se cumple en diciembre, se le reconocería el estatus de economía de mercado.
Sin embargo, los diputados de la Eurocámara se pronunciaron en mayo en contra de esta clasificación del país, ante la preocupación por las importaciones baratas chinas y la pérdida de puestos de trabajo.
La resolución no es vinculante pero la Comisión Europea necesita el apoyo de los parlamentarios si al final declara a China una economía de mercado.
Una fuente diplomática europea señaló a la agencia de noticias DPA que las dos partes ya se encaminan hacia una “guerra comercial”. “La presión está aumentando”.
Además, juristas europeos reconocen que Beijing cuenta con elementos de peso para hacer valer su posición; por eso es importante llegar a un acuerdo, indicó el diplomático.