Esta semana Alemania se convirtió en el tercer país, además de Suecia y Estados Unidos, que cuenta con un tramo de una autopista electrificada.
Alemania viene probando una serie de medidas para bajar la emisión de dióxido de carbono de manera significante. Primero redactó leyes para regular la velocidad de los autos a menos de 130 km/hr, lo cual reducirá considerablemente la emisión de CO2 del tráfico vehicular, además del fin de los recortes de impuestos para los automóviles diésel y las cuotas de vehículos híbridos y eléctricos. Sólo en 2017, el parque automotor fue responsable de la emisión de 115 millones de toneladas de CO2, confirmó la Oficina Federal de Estadísticas Alemana.
Sin embargo, su más reciente ecodesarrollo, una autopista eléctrica, fue inaugurada esta semana. Se trata de un tramo de cinco kilómetros de la autopista entre la ciudad Frankfurt y la ciudad de Darmstadt que conectará camiones híbridos a cables aéreos. La primera autopista eĺéctrica fue hecha en Suecia en el 2016. El concepto de esta es el mismo, los camiones usan pickups en sus techos para engancharse a los cables de la parte superior y extraer electricidad. Además los camiones pueden suministrar electricidad a la red cuando frenan, lo que lo hace un sistema muy útil si hay un embotellamiento.
Por el momento, el sistema no tendrá mucho impacto. Solo cinco camiones circularán por el tramo electrificado cada día, donde el 10% de los 135000 vehículos que la recorren a diario son camiones. Pero la reducción de la huella de emisión podría escalar a medida que más camiones se unan al sistema y podría alentar a las compañías de camiones a que se conviertan en eléctricas sabiendo que sus transportistas de carga podrían conducir más tiempo con una sóla carga.