La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) fue escenario de una importante visita en el contexto de las relaciones comerciales entre la Unión Europea y Argentina. En ese marco, Jordi Cañas, presidente de la Delegación para Relaciones con el Mercosur del Parlamento Europeo, brindó su visión sobre las implicancias de un potencial acuerdo entre MERCOSUR y la Unión Europea y su impacto en la economía argentina.
“Argentina ya está abierta al mundo, es un país exportador. Sabemos que es uno de los principales exportadores de alimentos del mundo, pero Argentina puede utilizar este acuerdo para agregar valor a su producción, incorporarse a las cadenas globales y crear mayor prosperidad y mayor riqueza para el país”, resaltó el eurodiputado.
La jornada incluyó un recorrido por las instalaciones de la BCR, donde los legisladores europeos pudieron conocer de cerca la rueda de operaciones de este importante centro económico. A continuación, se llevó a cabo una charla informativa a cargo de profesionales de la entidad local, en la que se abordaron temas de relevancia tanto para la región como para el acuerdo comercial que está en proceso.
Nuevas oportunidades
La visita de la delegación a Rosario es un claro indicativo de la importancia estratégica que reviste esta región para Argentina. Santa Fe y en particular la ciudad de Rosario, son consideradas por Cañas como el corazón económico del país, siendo un actor fundamental en la agroindustria y el comercio internacional. La intención de la delegación europea fue obtener una perspectiva diferente a la de la Capital Federal, al enfocarse en los aspectos económicos de Santa Fe.
El eurodiputado también hizo hincapié en la voluntad del nuevo gobierno argentino de seguir adelante con el acuerdo MERCOSUR-UE: “Las nuevas autoridades argentinas han dicho claramente que quieren este acuerdo, que están dispuestas a firmarlo y que creen que es una de las formas para abrir a Argentina al mundo”, dijo. Destacó que este acuerdo no solo representa una oportunidad para Argentina, sino que también es un mecanismo para abrir el país al mundo.
Por otro lado, vinculado a la nueva normativa sobre deforestación, Cañas subrayó que no son un obstáculo para Argentina, sino que, por el contrario, consideró que Argentina tiene la oportunidad de competir en mejores condiciones, dado que “prácticamente no produce soja en zonas deforestadas”. Añadió que el país está trabajando en un plan de trazabilidad para cumplir con estas demandas europeas y al hacerlo, podría tener acceso a mercados internacionales más amplios.