Luego de años de intensas negociaciones en junio de 2019 se firmó el acuerdo Unión Europea (UE) – Mercosur con Argentina en la era de las turbulencias. La pregunta obligada que nos hicimos en aquel momento fue: ¿continuarían las negociaciones para avanzar con los detalles de la letra chica?

Lo más reciente de esa discusión es la cuestión Malvinas. Un reclamo que regresó con más fuerza que nunca. Un punto importante de la disputa entre la República Argentina y el Reino Unido es el tema soberanía. Argentina ratifica su soberanía conforme el derecho internacional, el llamado a la reanudación de negociaciones es compartido por la Organización de Estados Americanos OEA, el G77 más China y otros foros multilaterales y regionales. 

El otro ítem, apunta a resolver las listas de indicaciones geográficas IG y propiedad intelectual que tendrían exclusividad en el mercado europeo. En el caso argentino se trata de más de cien nombres, muchos de los cuales corresponden a vinos. El acuerdo incluye disposiciones para facilitar el comercio de vinos y bebidas espirituosas, que abarcan el reconocimiento de las prácticas enológicas, la certificación y el etiquetado. En tanto el Mercosur, le reconocería a la UE más de trescientas de estas indicaciones IG. En todos los casos si las denominaciones constituyen una marca o parte de una marca existente, en los países del Mercosur se acordó su coexistencia sin necesidad de abandonar el uso marcario.

Sólo en algunos casos icónicos de la UE se han acordado plazos largos para el abandono de las marcas, lo cual permite la redenominación de los productos y posicionamiento en otros mercados. Existe un número muy limitado de excepciones, en virtud del llamado principio de exención, que se concedieron a productores previamente identificados que ya habían estado vendiendo productos con estos nombres en el mercado afectado durante un cierto número de años. 

Estas empresas pueden seguir utilizando el nombre sujeto a requisitos de etiquetado. Basado en el principio de “listas abiertas”, el acuerdo permitirá que nuevos nombres de IG, tanto de la UE como del Mercosur, se agreguen a las listas después de su entrada en vigor.

El capítulo incluye disposiciones integrales que abordan el espectro completo de derechos de propiedad intelectual, incluidos los de autor, marcas registradas y diseños industriales. 

Sobre las marcas, las disposiciones incluyen una referencia importante tanto al Protocolo de Madrid para el registro internacional de marcas y el Arreglo de Niza relativo a la clasificación internacional de productos y servicios a los efectos del registro de marcas.  

En cuanto a los diseños, las Partes han acordado hacer el mayor esfuerzo para cumplir con el Acta de Ginebra del Arreglo de La Haya sobre el registro internacional de diseños industriales. Los diseños deben estar protegidos durante al menos 15 años. En lo que respecta a las patentes, el texto acordado es plenamente compatible con las normas de la OMC / ADPIC.

Trato Nacional 

El capítulo incorpora disposiciones del GATT que tratan por igual los productos del socio comercial y los productos de fabricación nacional (el denominado “trato nacional”). Igualdad de condiciones en materia de competencia de las exportaciones.

Standstill

El acuerdo contiene el compromiso de no aumentar los derechos por encima de un tipo básico para todos los productos, incluidos los que no están sujetos a un trato preferencial. 

MiPyMEs

El acuerdo reconoce también a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas MiPyMEs. Teniendo en cuenta que poseen menores posibilidades para beneficiarse de las oportunidades comerciales que genera este acuerdo existe una sección específica en la que se establecen mecanismos para facilitar su inserción en el comercio internacional. La falta de información sobre el acceso a los mercados es una de las principales barreras comerciales para las MiPyMEs. Por lo tanto, existen disposiciones sobre “intercambio de información” que abordan la transparencia en relación con el acceso al mercado. Cada Parte debe proporcionar un sitio web específico con información relevante para las PyMEs que buscan acceder al mercado. 

La mirada del Mercosur

Los sectores industriales están inquietos por lo desparejo del nivel de competitividad y escala de un bloque y otro. Liberar el 90% o 100% de las líneas arancelarias en un plazo de 10/ 15 años, suena a corto. La promesa de ir eliminando gradualmente los aranceles podrían ser una oportunidad para competir en igualdad de condiciones. El tiempo dará la respuesta. 

El Mercosur eliminaría progresivamente los aranceles del 27% al vino, el 20% al chocolate y hasta un 35% del whisky y otras bebidas alcohólicas de origen europeo. También los lácteos (especialmente los quesos) entrarán al Mercosur sin arancel. En 10 años se abrirá el mercado a 30.000 toneladas de forma recíproca. Lo mismo ocurrirá, con la carne argentina que llegue a Europa. Otro sector que va notar la presión de la competitividad es el farmacéutico. Se eliminarán los aranceles que gravan los productos importados y los productores de la región tendrán una mayor competencia. Nuestra posición de estado emergente no cubrirá los costos en investigación y desarrollo como es el caso de Francia o Alemania. 

Hay que mencionar que el acuerdo obliga a las Partes a notificar en detalle sus procedimientos de licencias de importación y exportación y actualizar estas notificaciones según sea necesario. 

Un llamado de atención es que a uno y otro lado del océano, las denominaciones geográficas de productos regionales pasan a estar sumamente protegidas. Esto significa que se prohibirá el uso de un término de IG para productos con IG no genuinos y no se permitirán expresiones como “tipo”, “estilo”, “imitación” o similares. Argentina, Brasil, Paraguay o Uruguay no podrán usar en su etiqueta nombres como “vino Rioja” o “queso Manchego” propias de regiones de España. Tampoco el ”Jamón de Parma”, “Italiano prosciutto di Parma”, el ”Champagne” francés o el “Porto” portugués. Los whiskies escoceses o irlandeses también forman parte de esa lista. A su vez, la UE tendrá que respetar denominaciones geográficas del Mercosur como los “vinos de Mendoza” o la ka-sha-sa ”cachaça” brasileña.

Brexit 

Por último, un dato no menor con respecto a la salida del Reino Unido de la UE. El Reino Unido presentó en febrero una solicitud formal para unirse al Tratado Transpacífico buscando entrar al acuerdo de 11 países con el objetivo de abrir nuevas avenidas para su comercio tras el Brexit. Como vemos la estrategia de Londres para salir de la UE tiene un claro objetivo de expansión económica. El beneficio principal de abandonar la UE es la libertad de establecer acuerdos por todo el mundo. Hay que mencionar que el Tratado busca rebajar las barreras comerciales, establecer un marco común de propiedad intelectual, reforzar los estándares de derecho del trabajo, derecho ambiental y establecer un mecanismo de arbitraje de diferencias. 

Por Lic. Silvia Ladino, Director Pyempresa. Vocal Cámara de Comercio Argentina-Paraguay. Consultor en Confederación Argentina de la Mediana Empresa CAME.