Diego Heinrich se define como un emprendedor serial. Desde que finalizó sus estudios de Ingeniero Agrónomo, encaró distintos proyectos principalmente en el sector ganadero. Ahora, junto a Nicolás Balestrini, licenciado en Ciencias Biológicas y Gerente General del Instituto Rosenbusch, lanzaron Carnes Validadas, una plataforma que utiliza la tecnología Blockchain no sólo para la trazabilidad, sino también para darle una identidad individual a cada cabeza de ganado
Esta startup permite que a través de un código QR, el consumidor pueda conocer la historia del animal, desde su árbol genealógico, la alimentación y todo el trayecto hasta que llegó a la góndola del supermercado o al plato del comensal.
En diálogo con serindustria.com.ar, Heinrich brindó detalles sobre esta empresa que en una primera instancia apunta a darle valor agregado a través de la tecnología a todo el mercado latinoamericano.
¿Cómo nace Carnes Validadas?
En la búsqueda de agregar valor a la carne y en la búsqueda permanente de nuevos horizontes, nos encontramos con Nicolás explorando la tecnología blockchain. Descubrimos que en ella tenemos un aliado muy importante, una herramienta muy poderosa para darle valor agregado, contando la historia de la carne además de la trazabilidad ampliada, ya que permite hacer la identidad de las cabezas de ganado relacionadas con un lugar, un momento y un tiempo. Además, puede estar complementada con muchísima mayor información, desde fotos, vídeos, certificados, información del productor y del lugar donde transcurre su vida.
¿La carne dejaría de ser un commodity?
Lo que decimos es que ayudamos a descomoditizar la cadena de la carne porque, con lo que estamos promoviendo, los productores en lugar de producir solamente terneros van a tener terneros más datos y cuando ofrezcan sus terneros al mercado va a tener información que va a respaldar lo que vende.
¿Qué son los Token vaca?
Cada vez que nosotros damos de alta una cabeza de ganado en nuestra plataforma decimos que tenemos una activación patrimonial. Es como tener un auto con papeles y luego al sacar el seguro te sirve de respaldo para un crédito. Eso es nuestro Token vaca.
¿Con esto buscan también lanzar su propia criptomoneda?
Lo tradicional de los desarrollos que utilizan blockchain en el mundo es generar un token para usarlo como moneda y empiezan a jugar el mundo cripto. Nosotros decidimos empezar desde el otro lado, utilizando los atributos de blockchain para agregar valor al mundo físico y en el futuro ver si se genera una moneda. Siempre decimos que cada oportunidad física es una oportunidad digital, donde se genera una información en el mundo físico es a su vez una oportunidad digital que puede tener un impacto en la blockchain.
¿Cómo financiaron el comienzo?
Salimos a buscar capital de ángeles, fue orientada a gente de la industria de los diferentes eslabones de la cadena de valor de la carne. En ese momento incorporamos a 24 socios, cada uno de ellos, además de poner capital, puso su expertis. Ahora estamos con una ronda abierta.
¿La ganadería no escapa a este proceso de optimización de los datos?
Si bien es una de las actividades que siempre había quedado afuera, hoy dentro de la ganadería hay usuarios que están muy dispuestos y en la búsqueda de la digitalización de todos sus procesos. Richard Haass, en un artículo reciente, dijo que la pandemia no vino a cambiar las cosas, sino a acelerar los procesos y uno de los procesos que nosotros entendemos que se han acelerado es el de la digitalización. Entonces encontramos potenciales usuarios mucho más ávidos de usar tecnología que antes de la pandemia.
¿Además de en la Argentina, están trabajando en otros países?
Sí, en México y prontamente estaremos en Uruguay. Nuestro mercado objetivo es todo Latinoamérica, donde hay casi 450 millones de cabezas de ganado y buscamos darle soporte tecnológico. Nos definimos como la primera plataforma que va dar trazabilidad ampliada a toda la cadena de valor de la carne bovina. También somos globales, porque vamos a trabajar en toda Latinoamérica y multiservicio, porque todas aquellas startup o aplicaciones que generen información sobre la cadena de valor de la carne son nuestros potenciales aliados. Estamos desarrollando un ecosistema que termina siendo un canal de comunicación entre el primer eslabón y el último. Además, somos multiespecie, porque hoy estamos con carne bovina pero también estamos realizando relevamientos en cerdos, caprinos y salmón.
¿Cómo fue la recepción del sector ganadero?
Fue muy buena, fundamentalmente de los productores. De hecho, tenemos una apertura controlada de la herramienta y estamos invitando a los productores a que se postulen al programa PEA donde evaluamos si está dentro del perfil que nos puede ayudar y si está maduro como para usar la tecnología. Hace aproximadamente 60 días que tenemos las herramientas y ya están dentro más de 40 productores que tienen desde 200 cabezas hasta 20 mil. También estamos hablando con muchos importadores de Europa que ven con mucha expectativa la llegada de carne con esta tecnología.
¿Cómo es emprender en Argentina?
Emprender en la Argentina siempre es complicado. Me puedo denominar como un emprendedor serial. Desde que salí de la facultad y comencé con un emprendimiento de carne envasada al vacío llamado Cabañas Quenilo, después fui productor ganadero, desarrollador inmobiliario… Quienes emprenden en Estados Unidos, en general, tienen hasta más facilidades al acceso de financiamiento, pueden brindar más seguridades jurídicas a los inversores, porque tienen menos probabilidades de que cambien las reglas de juego. Para el emprendedor agropecuario, salir a buscar financiamiento para una siembra o para alquilar un lote o un tambo es casi imposible. En su momento hubo muchísimas facilidades, pero en 2008 cambió todo y para mal. Muchos emprendedores agropecuarios quedaron en el camino.
Pero, por ejemplo, el sector del software fue acompañado con una ley y quienes se dedican a eso, caso Mercado Libre o Globant, pudieron triunfar. Pero otros sectores que no la pasaron tan bien, no fue tan fácil. Por eso depende del sector en que estés, emprender es más o menos complejo, pero en ninguno tenés facilidades.