El campo, la energía, servicios basados en conocimiento, el turismo y la industria automotriz son los rubros que esperan variables optimistas para aportar las divisas más significativas a Argentina.
La balanza comercial de Argentina en lo que va del año no es la deseada por ninguno, incluso al conocerse la semana pasada que dejó de estar en rojo al lograr un saldo de u$s314 millones, la principal razón para explicar esa cifra que hace 20 meses era peor, fue por la baja de importaciones, pero no, como quiere el Gobierno, con el ingreso genuino de dólares por las exportaciones.
Los cinco sectores encabezados por el campo, podrían generar exportaciones por valor de u$s24.650 millones, según cálculos de la consultora Abeceb. “Considerando que también habrá una caída de importaciones, se pasaría de un déficit comercial de u$s 6500 millones de 2018 a un superávit de más de u$s6.000 millones en 2019”, pronosticó Javier Cao de Abeceb. Las variables que estos sectores esperan que se cumplan van desde el rezo para la no sequía, el crecimiento de Brasil, y la competitividad del dólar.
Campo
Mientras la sequía no aparezca este 2019, se espera que todo el complejo agropecuario, que incluye también a las economías regionales, proveerá u$s8.200 millones más que en 2018, con un ingreso de u$s40.500 millones, señaló, Ezequiel de Freijo, economista jefe de la Sociedad Rural Argentina. En la exportación de granos que comprende, maíz,trigo, soja y girasol, se van a obtener u$s6.500 millones adicionales a lo captado en 2018. En tanto, ganadería, carnes y lácteos puede haber u$s800 millones adicionales.
Energía
El optimismo de este sector deriva principalmente de las variedades no convencionales y del excedente que se espera obtener del predio de Vaca Muerta, que permitirá exportar algo, principalmente a Chile, así como disminuir las importaciones, de gas licuado principalmente.
Servicios
El sector de servicios basados en conocimiento donde se destaca la industria del software, que entre 2006 y 2015, según el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial del Ministerio de Trabajo, pasó de 3175 empresas a 4693, es uno de los pocos sectores en alza. En 2017, sus ventas al exterior representaron u$s1669 millones, una cifra que creció 26,5% respecto de 2016 (cuando se exportaron u$s1343millones). Adrián Anacleto, vicepresidente ejecutivo de Cessi (cámara de la industria argentina del software) proyecta para 2019 “facturar u$s 10.000 millones por exportaciones”, basados en tres pilares: una paridad cambiaria que se sostenga con el tiempo, la renovación de la ley del software (caduca en 2019) y la posibilidad de financiarse a una tasa razonable.
Turismo
Aunque dependa mucho de la situación interna, Gustavo Santos, secretario de Turismo de la Nación, ya ve buenos augurios, las exportaciones en 2018 terminarán un 10% arriba en comparación de 2017 (se pasará de u$s5400 millones a u$s6000 millones). “Representamos el 8% del total de las exportaciones de bienes y servicios, enfatizó Santos.
Las exportaciones de bienes en 2017 creció 0,9% respecto de 2016, mientras turismo creció 6,2% en igual período. Se espera que el turismo mantenga una tasa de crecimiento del 10%, con un ingreso de divisas estimado en u$s6600 millones. En este sector se incluyen ítems no relacionados al turismo, como el pago con tarjeta de crédito de servicios como Netflix.
Industria Automotriz
El sector más castigado en los últimos dos años espera que el crecimiento del vecino país, Brasil, acompañe un alza de este rubro. Sigaut Gravia, economista de Ecolatina, opina que además la fuerte depreciación del peso, que facilita la competencia por costos y el acceso a nuevos mercados.
Todas las proyecciones de este sector están volcadas en la exportación, “ya que el mercado interno tiene expectativas bastante negativas y se apuesta a compensar con la exportación ese déficit local. Se pasaría de 270.000 unidades exportadas en 2018 a 310.000 en 2019, lo que significaría unos u$s750 millones adicionales”, precisa Javier Cao.