El mundo del trabajo continúa mirando con preocupación al gobierno de Javier Milei. Luego de obtener las herramientas de la Ley de Bases, la restitución del Impuesto a las Ganancias, y las reformas Laboral y Fiscal aprobadas en el Congreso, la gestión libertaria se muestra igual de inconsistente que en la previa del debate legislativo. Más aún, inquietan las contradicciones del Presidente al avanzar en acciones que prometió “no” realizar.
Para los trabajadores, “hay un futuro incierto sobre el desarrollo productivo del país, es decir, para la actividad industrial, comercial y el trabajo en general”, opinó el secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Capitán Mariano Moreno.
“Los tiempos son complejos. Las determinaciones del Gobierno Nacional no están teniendo resultados que permitan pensar en un futuro promisorio para nuestra actividad en particular, y para todas las actividades productivas en general. No estoy visualizando un proyecto de desarrollo productivo genuino“, afirmó el dirigente, haciendo un llamado a la acción y reflexión sobre las políticas actuales.
En el mismo sentido, sostuvo que “el gobierno tiene todas las herramientas que solicitó y la verdad no es clara su política económica ni tampoco aparecen los inversionistas que prometió traer”.
“Nosotros, como representantes de los trabajadores, como sindicatos que no solo nos encargamos de la cuestión laboral sino también de la salud y el desarrollo profesional de nuestros trabajadores, no podemos quedarnos de brazos cruzados porque sabemos que no tenemos la posibilidad de tener una marina mercante ni una flota fluvial y pesquera desarrollada para lo que demanda el país”, agregó.
Fuerte caída de la actividad
En la misma línea, Moreno explicó que el derrumbe económico está golpeando al sector fluvial, marítimo y pesquero. “Nuestra actividad no es una isla que se mueve por sí misma, depende de otros sectores. Hoy vemos una industria que cayó al 48% de su capacidad instalada, cuando hace seis meses estábamos en el 75%. El consumo cayó estrepitosamente, incluso en alimentos“.
“Todos los movimientos portuarios están mermados. El combustible que transportamos se ve afectado, los granos aún están en los campos y el sector arenero está paralizado. Las obras públicas que dan sustento a nuestra actividad en el ámbito de la arena y piedra están paralizadas. Todo esto afecta a la sostenibilidad de las actividades, todo esto pone en riesgo a cientos de puestos de trabajo“, lamentó el sindicalista.
Además, advirtió que el sector aún se encuentra amenazado por una política de apertura de las aguas como ya intentaron con la “ZEE” en la Pesca y un borrador para eliminar la Ley de Cabotaje Nacional. En ese sentido, sostuvo que “se perderían miles de puestos de trabajo argentino”.
“Somos trabajadores especializados, tenemos una preparación que lleva años adquirirla. Estas actividades son muy profesionales y no es tan fácil reemplazar a los Capitanes, Oficiales o Patrones Fluviales con mano de obra barata como pretende este gobierno”, expresó el gremialista. Añadió que “esto sería buscar una competitividad económica a costa de la seguridad de la vida humana, de la navegación y del medio ambiente”.
Finalmente, Moreno destacó que, “si esta situación continúa profundizándose, los tiempos y la paciencia de los trabajadores comienzan a acortarse“.