Desde abril de este año, la Unión Industrial del Gran La Plata (UIGLP), es presidida por una empresaria. Quien ejerce esa responsabilidad es Eugenia Ctibor, licenciada en Psicología y directora de Cerámica Ctibor, empresa que fabrica ladrillos desde hace 117 años en la capital de la provincia de Buenos Aires.
En su visita a Ser Industria Radio, destacó que “es un gran honor presidir la Unión Industrial” y recordó que es cuarta generación de la compañía que conduce su padre.
Entre otros conceptos, sostuvo que el espíritu de su gestión es “articular lo público y lo privado, la UIGLP y la comunidad”. Dijo además quela industria necesita políticas que fomenten la productividad, la competitividad, la innovación, la tecnificación.
También se refirió al evento que se desarrollará el próximo miércoles en la UNLP paracelebrar el Día de la Industria y a la importancia de las políticas de género.
Consultada sobre la falta de respuesta de los gobiernos a las demandas del sector productivo, Ctibor respondió que “el empresario argentino no tiene tiempo para frustrarse, tiene que buscar soluciones”.
¿Cómo está la construcción en el país?
Nuestra actividad es el primer eslabón de una cadena de valor muy grande. Siempre decimos que cada ladrillo que sale de nuestras plantas genera un sinnúmero de trabajo genuino. Por eso entendemos que la construcción es motor de las economías regionales. Argentina ha salido de todas las crisis y dificultades cuando se puso en marcha la construcción. Por lo tanto, estamos muy comprometidos con nuestra industria. Hacemos inversiones e innovaciones en forma permanente porque hay que dar respuesta al déficit habitacional que tiene el país. Somos parte de un sector agrupa a 17 fábricas de ladrillos a nivel nacional. Fui presidenta de la Cámara Industrial de la Cerámica Roja y todas las empresas están tecnificadas, produciendo este producto que permite el desarrollo y el movimiento de la construcción y de las regiones.
Para resolver la falta de viviendas, ¿hace falta estímulo de parte del estado?
Creo que hacen falta muchas cosas, sobre todo en esta situación coyuntural que estamos viviendo. Se necesitan reglas claras, un marco de previsibilidad y ciertas acciones para que la gente pueda acceder a un crédito y a una vivienda.
¿Cómo definirías el universo que compone la UIGLP?
Primero quiero decir que es un gran honor presidir la UIGLP. Hace pocos meses que estoy en función y estoy recorriendo plantas y metiéndome en el entramado industrial de la región. Se habla mucho de que La Plata es una ciudad universitaria, administrativa, pero también tiene un componente industrial muy interesante, con mucha capacidad y volumen, que quizás no se conoce. La región tiene un polo petroquímico muy grande que atrae y tracciona fuentes de trabajo de gran volumen y profesionalización. Pero un 29% de las industrias de la ciudad son alimenticias. Están tecnificadas, preparadas para la exportación y ya compiten con mercados internacionales. Esto abarca todo lo que tiene que ver con lácteos, dulce de leche. Frigoríficos muy importantes que exportan el 80% en los mercados internacionales. También tenemos dos fábricas que juntas producimos 100.000 toneladas mensuales de ladrillos. Eso equivale a poder ir cubriendo ese déficit habitacional que hablamos. Hay industrias relacionadas con la producción textil, el plástico, el caucho, las harinas… Empresas de más de 100 años.
Significa que enfrentaron todo tipo de crisis…
Sí y es una característica que hay que destacar. Particularmente cuando pensamos en esta Argentina tan cíclica. Tener en la ciudad industrias que tienen más de 100, 80, 50 años, habla de una apuesta muy grande a que esto salga adelante. No cerramos las puertas y nos vamos, sino que la mirada está puesta a ese largo plazo tan bendito. La industria pide previsibilidad. Si tuviéramos en estos momentos marcos de referencia de mediano y a largo plazo, todo sería más sencillo. La coyuntura a veces nos golpea, pero la mirada de los industriales tiene que estar a largo plazo, porque toda inversión, diseño nuevo o reconversión que se haga, lleva 2, 3, 4 años.
¿Parte de tu gestión es acercar la importancia de la industria al resto de la sociedad?
Sí, claro. El espíritu de esta gestión es articular lo público y lo privado, la UIGLP y la comunidad. Esto no solamente tiene que ver con el vínculo con la Universidad Nacional, la UCALP, la UTN, las escuelas tecnológicas. Pero uno de los grandes objetivos es buscar los recursos que la industria necesita en este proceso de transformación que está viviendo y tiene que ver con la tecnificación, la digitalización. Ese diálogo estratégico que debemos tener con lo educativo, hace que luego se pueda contar en la región con recursos adecuados para la industria. Lo mismo sucede con lo público, las municipalidades, las escuelas, los funcionarios, en esta cuestión de mejorar las políticas públicas para las necesidades que tengamos en relación a la industria. Pero además de ser una gremial empresaria territorial, también estamos enlazados a nivel provincial y con la UIA.
¿Hay un déficit en materia de recursos humanos?
No diría déficit, sino adecuación, me parece que esa es la palabra empresarial. La industria ha desarrollado y actualizado los procesos productivos en relación a la tecnificación, la digitalización. Abrió sus puertas a esta integración de igualdad y de equidad. Hay industrias que están trabajando muy bien la política de género. Por ejemplo, nosotros estamos yendo a las escuelas tecnológicas para hablar con las jóvenes que se están recibiendo, que salen con un título que las habilita en el mundo laboral. Les mostramos el mundo industrial y nos acercamos para que sepan que las industrias incorporan mujeres en sus plantas para realizar los procesos productivos. Para que sepan que tener un título técnico, sea en la especialidad de ámbito mecánica o electricidad, es una posibilidad. Les podemos decir que no tienen que conformarse con un trabajar en un comercio. Ese diálogo está sucediendo y es importante.
¿Las políticas de género activas lograron mejoraron esa inserción?
Claro y eso hay que contarlo, visibilizarlo porque está sucediendo en la región, se trabaja muy bien.
Es importante que las empresas lo hayan asumido, porque a veces las políticas públicas quedan en enunciados…
Sí y también hemos generado el departamento de jóvenes que estamos desarrollando. Que la UIGLP pueda tener este departamento y que nosotros podamos fomentarlo dentro de la gremial empresaria, es muy integrador, porque permite tener distintas miradas. Es otro punto de la agenda que estamos desarrollando.
En relación a los jóvenes, el Indec informó que el 60% de los menores de 14 años vive en la pobreza. ¿Analizan este tema desde la industria?
Sí, no podemos desentendernos. Si el Estado no se pudo ocupar, los privados tenemos esa responsabilidad y podemos hacerlo. Notamos que la industria ha avanzado mucho en la responsabilidad social.
Los estamentos políticos dan pocas respuestas a la problemática empresarial. ¿Eso genera frustración?
El empresario argentino no tiene tiempo para frustrarse. Hay que seguir. Cuando tenés una industria y sos responsable de más de 100 familias que trabajan con vos, hay que buscar soluciones. Si no se consiguen en un lugar, hay que buscarlas en otro. Lo interesante es el trabajo en red, con las gremiales, las instituciones… Argentina está atravesando un momento muy preocupante, pero creo que el 22 de octubre es un momento histórico donde, con responsabilidad la ciudadanía, tiene que decidirse el modelo de país que necesitamos y merecemos. Más que frustrados estamos a la expectativa de lo que va a pasar. En el “mientras tanto” vamos surfeando estas olas y tratando de proteger las industrias, las fuentes de trabajo y la estabilidad de cada empresa.
Hace poco se desarrolló “Somos Industria 2023” y fuiste una de las moderadoras. ¿Qué sensaciones te dejó la megamuestra?
El congreso de Somos Industria fue muy interesante. Lo organizaron la UIPBA, ADIBA y RedParques. Fueron dos días muy intensos, con temas de la agenda industrial y una gran concurrencia, superior a 6500 personas. La exposición de las industrias de la Provincia fue muy variada, amplia. Los espacios de los candidatos a la gobernación permitieron escuchar los tres modelos de país que proponen de cara a las elecciones.
¿Quedaron conformes con la repercusión?
Sí, porque pasamos por todos los temas que nos incumben como industriales, economía, sustentabilidad… Estuvimos con Red MIA, Mujeres en la Industria Argentina, los jóvenes….
En relación a la Red, fue importante el número de mujeres industriales, que participaron…
Siempre lo digo, es un momento histórico, muy profundo. Que sea la presidenta de una Unión Industrial, tiene que ver con un proceso de movimiento, de transformación que se está generando y que viene realizándose hace muchos años. Se relaciona con una apertura de conciencia, de la integración de mesas de decisión más diversas. Venimos trabajando desde la pandemia con la creación de esta Red y vamos visibilizando y rescatando a todas aquellas mujeres que están en la soledad, en las industrias. Hay muchas y es muy bueno integrarnos, todo se potencia más.
Teniendo en cuenta que en pocos meses tendremos un nuevo gobierno, ¿cuáles son las medidas más urgentes que necesitan los industriales?
Hay varias aristas sumamente importantes. La presión tributaria que impacta en la industria, es muy grande. Si nos piden que compitamos con el mundo, las condiciones no son las adecuadas. Los demás países tienen otra carga tributaria, otras políticas productivas. Me parece que por ahí pasa la mayor parte de las acciones o de las medidas que deberían tomarse. De la misma manera. esta la litigiosidad que tenemos en relación a la cuestión laboral. Necesitamos políticas que fomenten la productividad, la competitividad, la innovación, la tecnificación. También menor carga fiscal, mayor previsibilidad… El 90% de las plantas industriales están tecnificadas para competir y la verdad esto es un diálogo que tenemos todo el tiempo con Europa, Estados Unidos, el mundo. Pero no podemos traer los repuestos que necesitamos. Entonces, nos tecnificamos y ahora no podemos traer insumos, repuestos. Ese es un problema.
¿Hay plantas paradas en la región a causa de esto?
No, pero tienen muchísimas dificultades, están con delay, con muchísima gestión para lograr que el repuesto llegue. De golpe tenés tres, cuatro personas trabajando para que la SIRA se apruebe. Eso te desfocaliza, cuando en realidad durante años fue fluido.
¿Van a celebrar el Día de la Industria?
Sí, el miércoles 4 de octubre a las 18, nos reuniremos en el salón del edificio Karakachov, de la UNLP. Allí vamos a trabajar la agenda de la industria, abordando temas de sustentabilidad, tecnificación, todo lo que esté de cara al futuro en relación a una industria que está en un proceso de transformación o que ha logrado ese camino. Y vamos a abordar cuestiones como el liderazgo y agentes de cambio. Ver qué habilidades, qué liderazgo son los que llevarán adelante estas empresas en relación a los distintos rumbos que se van planteando, estos cambios constantes. Están invitados todos los industriales, pero también la comunidad en su conjunto. Vamos a entregar un premio muy interesante. Otro tema importante es que hablaremos del camino de la sustentabilidad, la agenda 2030 y los objetivos de desarrollo sostenible. Nos va a acompañar Patricia Malnati, que hoy está en Estados Unidos en el Pacto Global Desarrollo, entendiendo hacia dónde va el mundo.
¿Qué podés contarnos del premio?
Es un concurso que desarrollamos junto a la provincia de Buenos Aires. Se presentaron proyectos relacionados con la tecnificación y la innovación de las escuelas tecnológicas. Lo interesante es que la ciudad de La Plata fue la que presentó más iniciativas y una de ellas se consagró finalista. Vamos a destacar y premiar a esa institución. Esto refuerza el desarrollo de los jóvenes dentro de la industria y expresa la intención de acompañarlos porque en el futuro serán nuestros recursos.