Así lo informó el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, al anticipar un encuentro con el ministro de Minas y Energía de Brasil, Eduardo Braga, y el viceministro de Energía del Brasil, Luis Eduardo Barata, con quienes buscará definir la propuesta del gobierno de Dilma Rousseff y su interés de renovar el contrato de gas a partir de 2019.
La Agencia Boliviana de Información informó que Sánchez sostuvo que esa reunión será “el primer paso” para que ambos países trabajen en la renovación del contrato de compra y venta de gas.
“Brasil quiere entre 20 y 30 años y nosotros tenemos la reserva y los recursos suficientes, la campaña exploratoria, la logística, las plantas de procesamiento, además el tema es abastecer a algunas poblaciones limítrofes de Brasil y ser socios”, indicó.
Según datos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), ejecutivos de Petrobras oficializaron en agosto de 2014 el interés de Brasil de negociar la firma de un nuevo contrato para la compra venta de gas natural boliviano a partir de 2020.
El contrato entre Bolivia y Brasil, firmado en 1996 y vigente hasta 2019, establece un volumen mínimo de compra de 24 millones a 30,08 metros cúbicos por día.
El funcionario boliviano también precisó que un equipo de ENDE y de Eletrobras trabajará en la posibilidad de construir usinas termoeléctricas a corto plazo con uso exclusivo para Brasil, y se diseñará la línea de transmisión que interconectará a ambos países y se trabajará en el estudio, financiamiento y construcción de nuevas represas hidroeléctricas.