El Gobierno Nacional ha oficializado la reglamentación del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) mediante el Decreto 749/2024, una medida destinada a promover y atraer inversiones significativas en Argentina. Este régimen busca captar proyectos que superen un umbral mínimo de inversión de 200 millones de dólares, con un enfoque en proyectos de larga maduración que generen empleo real y fomenten la actividad productiva del país.
El RIGI está diseñado para incentivar inversiones donde los ingresos durante los primeros tres años no superen el 30% de la inversión total. Aunque se espera que la mayoría del capital provenga de inversores extranjeros, la industria nacional también está invitada a participar. Esta iniciativa se proyecta como un motor para la economía argentina, con el potencial de triplicar el nivel de exportaciones en una década, gracias a una serie de beneficios impositivos, aduaneros y cambiarios que buscan hacer competitivos a los proyectos locales frente a otros regímenes en la región y el mundo.
Entre los sectores que podrán beneficiarse del RIGI se encuentran la forestoindustria, el turismo, la infraestructura, la minería, la tecnología, la siderurgia, la energía, y el petróleo y gas. Estos sectores tendrán un plazo de dos años para adherirse al régimen, desde la entrada en vigencia de la medida. Además, el RIGI permitirá la adhesión de vehículos de proyecto único, siempre que se destinen exclusivamente a la ejecución de proyectos que califiquen como “Gran Inversión”.
Para que un proyecto sea considerado como “Gran Inversión”, deberá cumplir con varios requisitos: una inversión en activos computables igual o superior a 200 millones de dólares, completar dicho monto antes de la fecha límite comprometida en el Plan de Inversión, y asegurar una inversión mínima en activos computables durante los primeros dos años, según lo establezca la Autoridad de Aplicación. Además, se exige que al menos el 40% del monto mínimo de inversión se cumpla dentro de los dos primeros años desde la aprobación de la solicitud de adhesión al RIGI.
El RIGI representa una gran oportunidad para impulsar el desarrollo en regiones del país que actualmente carecen de servicios básicos. Además de generar empleo, se espera que fomente la creación de pequeñas y medianas empresas proveedoras de bienes y servicios en diversos sectores económicos.
Esta medida introduce un régimen diferencial, distinto al actual paquete fiscal, con la intención de que el régimen impositivo general de Argentina se acerque en el futuro a lo que hoy se propone con el RIGI. Según el Gobierno, este régimen podría dar un nuevo impulso a la economía, atraer inversiones, generar empleo y ayudar a revertir la decadencia económica que enfrenta el país.