La construcción sustentable va más allá de ser una tendencia; es una respuesta necesaria a los desafíos ambientales y energéticos que enfrentamos. Este enfoque busca minimizar el impacto negativo de las nuevas construcciones sobre el medio ambiente y mejorar la calidad de vida de sus ocupantes.
Incorporar elementos sustentables al momento de edificar implica utilizar recursos de manera eficiente, reducir las emisiones de carbono y crear espacios saludables y confortables.
Las construcciones sustentables no solo son buenas para el planeta, sino que también ofrecen beneficios económicos significativos. Reducen los costos operativos a través de la eficiencia energética, aumentan el valor de las propiedades y mejoran la satisfacción de sus ocupantes. Estos beneficios hacen que la construcción sustentable sea una inversión inteligente para el futuro.
Referencias Internacionales
La importancia de la sostenibilidad en la construcción ya se refleja en los códigos técnicos de varios países. Por ejemplo, en la Unión Europea (UE), la Directiva sobre el Rendimiento Energético de los Edificios dictaminó que los nuevos inmuebles deberán ser de impacto neutro a partir de 2030.
Las nuevas construcciones ocupadas por las autoridades públicas o que sean de su propiedad deberán alcanzar este objetivo ya en 2028, En el caso de los edificios residenciales, los países de la UE tendrán que adoptar medidas que garanticen una reducción en promedio de energía primaria utilizada de al menos un 16 % para 2030 y al menos entre un 20 y un 22 % para 2035, lo que implica una alta eficiencia energética y el uso de energía renovable, como la solar. Países como Alemania y España han incorporado estos requisitos en sus códigos de construcción, promoviendo el uso de tecnologías sostenibles en todos los nuevos desarrollos.
En Estados Unidos, el estado de California ha adoptado una medida que apoya el uso de las energías sustentables y según la cual todas las casas que se construyan deberán contar con paneles solares. Este tipo de normativas no solo impulsa la adopción de energía solar, sino que también establece un estándar para la construcción sostenible que otros estados y países están comenzando a seguir.
Australia también ha dado pasos significativos en esta dirección con su Código Nacional de Construcción, que incluye requisitos para la eficiencia energética y fomenta el uso de energías renovables. Aproximadamente 100 comunidades de ese país han puesto en marcha diferentes proyectos de energía comunitaria que se encuentran en diferentes fases.
El concepto de energía comunitaria se basa en la creencia de que la ciudadanía debería tener el control sobre la energía que consume. Eso incluye controlar el impacto ambiental y social. Estas regulaciones benefician al medio ambiente, generan ahorros significativos en costos energéticos para los propietarios y ocupantes de edificios.
La Clave para la Eficiencia Energética
La energía solar es una de las tecnologías más prometedoras para alcanzar la eficiencia energética en la construcción inteligente. Al aprovechar los rayos del sol, podemos gestar energía limpia y renovable, reducir la dependencia de un único proveedor eléctrico y convertirnos en generadores de energía además de disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los sistemas de energía solar, como los paneles fotovoltaicos y los termotanques solares, pueden integrarse fácilmente al uso doméstico como corporativo proporcionando energía eléctrica y agua caliente sanitaria.
En Argentina, con la ley de Generación Distribuida, los usuarios propietarios de un sistema fotovoltaico tienen la posibilidad de inyectar energía solar a la red y ser proveedores recibiendo una compensación por la misma.
Un nuevo concepto
La proyección de hogares y empresas con un enfoque en la sostenibilidad y la eficiencia energética es fundamental para construir un futuro resiliente.
La capacidad de generar y gestionar su propia energía otorga una mayor independencia, protegiendo a usuarios y empresas de las fluctuaciones de precios y las interrupciones en el suministro eléctrico.
En síntesis, la energía solar es una pieza clave en la transformación de la construcción hacia un modelo más inteligente y eficiente. La construcción sustentable no es una tendencia pasajera, sino una nueva forma de proyectar y construir parte de un movimiento mundial que llegó para quedarse.