A pesar de un inicio de año marcado por desafíos económicos y un consumo incierto, Puratos, empresa de tecnología en alimentos de origen belga, cierra el 2024 en Argentina con señales de recuperación. Con indicadores que comenzaron a mejorar a partir de junio, el repunte empezó a verse en sectores clave como la panadería, que demostró ser un termómetro de la reactivación del mercado.
Además, la compañía conquistó hitos importantes, como el incremento del 30% en exportaciones, avances en seguridad, un fuerte compromiso con el talento local y la excelencia operativa, que serán pilares fundamentales para el crecimiento proyectado del próximo año.
Aunque heterogéneo, el consumo en el país empieza a mostrar signos positivos luego de un primer semestre desafiante. Según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en octubre hubo un primer repunte interanual de las ventas minoristas en PyMEs (2,9%) y en términos mensuales sin estacionalidad el rebote fue del 7,4%. Sin embargo, acumulan una caída de 13,2% en los primeros 10 meses del año.
Sin embargo, todavía hay categorías donde la baja de consumo aún se siente. Según datos de la consultora Scentia, la categoría de consumos “Impulsivos”, que incluye desde alfajores y bombones hasta postres, en los supermercados y autoservicios marcó un descenso de 32,3% interanual en septiembre.
“Este año cierra con una nota más prometedora de lo que su inicio nos anticipaba. A partir de junio, todos los indicadores de nuestro negocio comenzaron a mostrar un crecimiento sostenido en comparación con el año anterior. Incluso, algunos de ellos han alcanzado niveles similares a los registrados en 2022, reflejando no solo nuestra capacidad de adaptación, sino también la fortaleza de nuestra estrategia y el compromiso de nuestro equipo”, explica Joaquín Garat, gerente General de Puratos para Argentina, Uruguay y Paraguay.
De acuerdo al registro de la compañía que provee de insumos a la industria de pastelería, chocolate y panadería, el movimiento comenzó a notarse especialmente en este último segmento a partir del Día de la Madre. “Las panaderías son un buen termómetro del consumo porque reaccionan muy rápidamente. Este tipo de fechas suelen ser hitos importantes y aunque el sector se mostró cauteloso, logró alcanzar sus objetivos de ventas. Ahora esperamos que se repita lo mismo para Navidad”, menciona el directivo de la compañía que ya registra un aumento tanto en el consumo como en el ticket promedio de los compradores.
Este año, la empresa convalidó una inversión de US$ 7 millones para su operación argentina. Con este aporte, la filial superó los US$ 15 millones invertidos en los últimos cuatro años.
Desde su planta en Pacheco, la compañía provee todos los insumos necesarios para abastecer a una panadería, pasteleria o chocolatería (polvos, chocolate, líneas de rellenos) a mercados clave como Brasil, Uruguay, Paraguay, Trinidad y Tobago y Chile. Este crecimiento fue posible gracias a una mayor competitividad cambiaria, lo que permitió reactivar exportaciones hacia otras filiales de la compañía.
Con el talento en el centro
Al hablar de hitos, Garat menciona como gran logro el cuidado de la gente: se cumplen 1000 días sin accidentes en la planta productora de Argentina, fruto del trabajo del área de Seguridad e higiene.
Además, la firma en donde trabajan 122 personas, fue elegida entre los tres mejores empleadores de la Argentina. “Somos una multinacional, pero seguimos siendo una compañía familiar y ese balance hace que la empresa se vuelva un lugar muy interesante para trabajar”, explica Garat.
Al mismo tiempo, la compañía reafirma su enfoque en el desarrollo de talento e incluso muchos profesionales argentinos ascienden a puestos regionales o globales en otras filiales internacionales debido a la calidad de su formación, lo que ofrece oportunidades para que los jóvenes puedan crecer y participar en proyectos internacionales.
Proyecciones
Desde la compañía encaran el 2025 con optimismo y proyectan un crecimiento de al menos un 10% en volumen gracias al repunte del consumo y a la ampliación de su cobertura en mercados clave. “El desafío de este año era mantener el negocio en moneda dura. Eso lo logramos. Para el año que viene el reto es volver a crecer. Los fundamentales del negocio están en orden para poder volver al volumen registrado en 2022”, anticipa Garat.
Entre las principales apuestas para el próximo año se encuentra el impulso a la línea de rellenos húmedos, que, tras su puesta en marcha este año, comenzó a ganar reconocimiento en el mercado. Desde el management esperan que este segmento crezca, con exportaciones hacia Brasil como uno de los hitos más relevantes. Además, la compañía planea concretar nuevas inversiones estratégicas, como la producción de chocolate líquido, que no solo ampliará su portafolio, sino que también reforzará su compromiso con la sostenibilidad al optimizar recursos energéticos.
Por último, la creciente demanda de productos más saludables y sostenibles marcará las tendencias en panadería y pastelería durante el próximo año. Puratos reafirma su compromiso con iniciativas de Salud y Bienestar, orientadas a reducir grasas y azúcares en sus productos y a desarrollar opciones percibidas como más naturales, como las elaboradas en base a plantas. En panadería, el uso de granos, semillas y masa madre sigue ganando terreno, mientras que en pastelería se observa un auge en los rellenos con alto contenido de frutas. Todo con una visión de largo plazo: el objetivo para la compañía es que para 2030 el 50% de los productos vendidos favorezcan esta tendencia.