La iniciativa, financiada por la cartera de Ciencia, fomenta el desarrollo de redes inteligentes de distribución a partir de fuentes renovables en la provincia del Neuquén.
La Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, adjudicó un subsidio de $13.216.125 para el desarrollo de redes de energía modernas, limpias y flexibles, en la localidad de Centenario, provincia del Neuquén, con el objetivo de impulsar una mayor participación de las energías renovables en la red eléctrica existente, contribuyendo así a diversificar la matriz energética.
La iniciativa, que será llevada adelante por un consorcio público privado integrado por la Universidad Nacional de San Martín, el Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) y la empresa dedicada a brindar soluciones energéticas sustentables, Aldar S.A., fue aprobada en el marco de la convocatoria “Fondo de Innovación Tecnológica Regional (FITR) –Energía- 2013” que administra el Fondo Argentino Sectorial (FONARSEC) de la Agencia. El proyecto se considera una experiencia piloto en el país a partir de la introducción de técnicas de microredes inteligentes que se proponen combinar la tele supervisión y el tele control del sistema de distribución de baja tensión con un conjunto de generadores fotovoltaicos distribuidos en la localidad, incorporando así infraestructura de comunicación, gestión de datos de información y elementos de control y seguridad a las redes de distribución existentes.
Durante la de firma del contrato, la directora del FONARSEC, Prof. Isabel Mac Donald, manifestó que “es fundamental promover mecanismos de desarrollo de fuentes energéticas alternativas basadas en recursos renovables que se apoyen en la enorme potencialidad que tiene el país en materia de energía, considerado un tema crítico para lograr la diversificación de la matriz energética nacional”.
El proyecto recibió financiamiento para trabajar en el diseño, instalación y operación de sistemas solares fotovoltaicos, con una potencia máxima del orden del 40% de la potencia de los transformadores asociados a la red existente; promover la evaluación de los efectos de la generación distribuida sobre la calidad del servicio; contribuir con el desarrollo de la primera experiencia de incorporación de tecnologías de generación distribuida, control y optimización de la demanda; y gestionar el monitoreo automático de las subestaciones transformadoras de baja tensión. A su vez, se propone crear una plataforma que permita evaluar el impacto económico, social y medioambiental que generará la iniciativa.
La Universidad Nacional de San Martín, EPEN y Aldar S.A., aportarán $3.304.031 como contraparte para la ejecución del proyecto que compromete una inversión total de $16.520.156 en un plazo de 3 años.