En una conferencia de prensa que brinda en el Microcine del Palacio de Hacienda, el ministro dijo que existen “opiniones mal intencionadas, mal informadas” y que frente a esto el gobierno tiene la decisión de seguir trabajando.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que el término default “no es una sensación termica sino una cuestión eminentemente legal”.
“Argentina se encontraría en default si alguno de los eventos contemplados y explicados claramente en los contratos hubiera ocurrido y ninguna de estas cuestiones se cumplen”, explicó el ministro durante una conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda.
Al respecto, enumeró que estos eventos son cuatro: no pago, incumpliento de otras obligaciones o incumplmiento cruzado, moratoria y validez, y aseguró que ninguno de estas situaciones ocurrió en el caso con los fondos buitres.
Más adelante señaló que lo que está ocurriendo con los fondos buitre “no tiene nombre”, pero en caso de tenerlo “nunca sería default”, en función de los prospectos del canje de la deuda de 2005.
Kicillof explicó que “los pagos de la Argentina, relacionados con la oferta del canje de 2005, podían ser embargados por los acreedores que no aceptaron la oferta”, según el prospecto de aquella reestructuración.
“El default es cuando no se paga y no cuando no se puede cobrar por determinados riesgos contemplados en el prospecto del canje, como ocurre hoy con los hold-outs, y también por toda otra serie de razones”, dijo Kicillof.
En otro tramo de la conferencia, Kicillof aseveró hoy que el juez de Nueva York Thomás Griesa “perjudica a terceros” al entender que “favorecer a los buitres es uno de los objetivos centrales de este juez” y desvirtuó la interpretación de una situación de default de la Argentina al insistir en que el juez Griesa “está poniendo en cuestión el cobro de terceros para que un uno por ciento cobre por sobre el 92 por ciento” que ingresó a los canjes de 2005 y 2010.