En un escenario cargado de incertidumbre y tensiones económicas, las alarmas se encienden en el sector empresarial argentino. La Federación de Cámaras de Comercio Exterior de la República Argentina (FECACERA) emitió un comunicado en el que expresó su “profunda preocupación por las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional” que amenazan con asfixiar el acceso de importaciones cruciales para la producción, así como a servicios esenciales para el comercio exterior.
“El desarrollo productivo vinculado al comercio internacional implica para las empresas un esfuerzo que lleva años consolidar. Decisiones como las planteadas por el Gobierno, significan un duro retroceso en este proceso”, sostuvo el presidente de FECACERA, Federico Rodríguez.
FECACERA ve con preocupación las medidas que afectarán a las importaciones
La estrategia gubernamental resultó contraproducente al dificultar el dinamismo del comercio exterior y fomentar trabas y limitaciones en los procesos de importación y pagos internacionales. En el documento, la entidad sostiene que “las medidas impulsadas por el Gobierno Nacional van en contra de lo que el comercio internacional requiere para crecer”.
Además, Rodríguez indicó que “además del nuevo impuesto que se ha implementado, no hay mayor fluidez en el comercio exterior. Al contrario, todos los sistemas aduaneros y bancarios han colapsado producto de los ajustes que deben hacer. Estamos viendo un escenario más restrictivo que antes y por ende más preocupante”.
Empresas al borde del cierre
Los sectores productivos vinculados al comercio internacional han sido históricamente pilares fundamentales para el crecimiento económico del país. Sin embargo, las nuevas restricciones amenazan con socavar estos cimientos. La estabilidad macroeconómica y unas reglas de juego claras son esenciales para que las empresas puedan desenvolverse eficientemente en el mercado global y competir con el resto del mundo. Lamentablemente, estas condiciones parecen estar desvaneciéndose bajo el impacto de las recientes políticas gubernamentales.
La preocupación por el impacto económico y social se intensifica ante la posibilidad de que muchas empresas se vean forzadas a cerrar sus puertas debido a la imposibilidad de producir y cumplir con sus compromisos, afectando seriamente el empleo y la estabilidad laboral en el país.
“Los niveles productivos están en declive, los empleos también lo están. Estamos llegando al punto de que las empresas se están descapitalizando fuertemente. Hay compromisos que se realizan en base a un dólar oficial, al cual prácticamente no hay acceso. Esto hace que tanto industrias y empresas de servicio, tengan que abastecerse de insumos y de servicios en el exterior a un dólar muchísimo más alto”, explicó el titular de FECACERA.
Al respecto, concluyó que “crear una empresa lleva muchos años y si no se revierte esta situación de parálisis, muchas van a cerrar, y vamos a perder mucho capital emprendedor en el país”.