En marzo de 2023, el Indicador de Consumo (IC) de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) mostró un avance de 3,2% en la comparación interanual (i.a.), con un crecimiento desestacionalizado de 1,6% frente al mes de febrero, es decir, descontando los efectos estacionales habituales del consumo a lo largo del año.

Este nuevo indicador desarrollado por la CAC refleja la evolución del consumo de los hogares en bienes y servicios finales con una periodicidad mensual, expandiendo y complementando los aportes de información que realiza la Cámara al seguimiento del comercio, los servicios y la actividad económica en general.

El IC mostró un primer trimestre de 2023 en terreno positivo (4,8% i.a.), recuperando de forma parcial lo perdido a raíz del cambio de dinámica a mediados de 2022, momento en que se pasó a un proceso de retracción seguido de estancamiento. Sin embargo, en términos desestacionalizados, marzo aún se ubicó más del 4% por debajo de junio de 2022, momento previo al quiebre de tendencia mencionado.

En este sentido, las tasas de crecimiento de dos dígitos vistas durante gran parte del año pasado parecerían haber quedado atrás, continuando hasta el día de hoy con una desaceleración progresiva que le quita dinamismo al consumo.

Si se analiza el desempeño de algunos rubros en particular, se observa una dinámica compartida de desaceleración del crecimiento interanual a partir de la segunda mitad de 2022, junto con las primeras señales negativas en algunas categorías.

Indicador de consumo, análisis por rubros

El rubro de indumentaria y calzado mostró en marzo una caída estimada de 7,5% i.a. (con una contribución negativa de medio punto porcentual —p.p.— al avance del 3,2% i.a. del IC), nuevamente enmarcada en la pérdida de dinamismo a lo largo de 2022 que se sostiene hasta el día de hoy, acompañada de un encarecimiento relativo de los precios del sector en la comparación interanual ( 7%). De esta forma, el consumo de esta categoría se ubicó más de un 24% por debajo de los niveles vigentes previo a la disrupción sanitaria.

Por otro lado, el capítulo de transporte y vehículos mostró un crecimiento estimado del 16,1% i.a. en marzo (con una incidencia de 2,1 p.p. en la variación interanual del IC), de la mano de una buena performance de los patentamientos, tanto de autos como de motos (15,2% y 13,5% i.a., respectivamente).

Recreación y cultura aún muestra tasas de crecimiento significativas (con un avance estimado de 15,3% i.a. en marzo y una contribución al IC de 1 p.p.), aunque la desaceleración parecería haber llegado incluso a este rubro, uno de los que comenzó su recuperación de forma más tardía luego de la salida de la pandemia.

En cuanto al apartado de vivienda, alquileres y servicios públicos, este mostró un avance estimado de 9% i.a. en el tercer mes del año (con una contribución de 1,4 p.p. al IC), traccionado en parte por el elevado consumo energético a raíz de las temperaturas anormalmente altas. De esta forma, el rubro cierra el primer trimestre con un avance estimado cercano al 5% i.a.

Con respecto al resto de los rubros, estos experimentaron una contracción estimada del 1,4% i.a. en marzo (y una incidencia negativa de 0,8 p.p.), posicionándose en niveles casi empatados con la comparación con 2019.