Así se confirmó durante la reunión que mantuvieron los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi, con directivos de la Asociación de Fábricas de Automotores.
Tras el encuentro, el Gobierno informó en un breve comunicado que “en relación a los casos de suspensiones parciales de personal adoptadas por algunas de las terminales, los ejecutivos señalaron que se trata de una respuesta transitoria pero que de ninguna manera corren peligro las fuentes de trabajo en ninguna compañía”.
Fuentes que participaron en la reunión detallaron que los directivos aseguraron al Gobierno que no habrá despidos en las terminales, a pesar de la caída de ventas que registró el mercado local en el primer cuatrimestre del año, luego de un 2013 récord en producción y patentamientos.
Las empresas explicaron a Kicillof y a Giorgi que las suspensiones que se vienen registrando en las distintas marcas es una situación coyuntural, a la que apelan para poder adecuar la acumulación de stock a una demanda menor a la proyectada para la primera mitad del año.
En este contexto, el Gobierno no descartaba la posibilidad de auxiliar a las empresas a través de los Programas de Recuperación Productiva (Repro), con el objetivo de evitar la posibilidad de despidos, más allá del compromiso asumido por los empresarios del sector en cuanto a mantener los niveles de empleo.
Como parte de esa coyuntura, el eje central del diálogo de hoy pasó por la situación actual y las proyecciones del mercado brasileño, destino que representa entre el 85 y el 90 por ciento de las exportaciones locales y que atraviesa un período de retracción similar al de la Argentina.
“En ese marco, se abordaron principalmente las razones de la caída de las exportaciones al exterior y particularmente al mercado brasileño y se conversó sobre los avances en el acuerdo con el Gobierno y los representantes sectoriales del vecino país, tal como se viene trabajando en las últimas semanas”, sostuvo un comunicado conjunto dado a conocer por las carteras de Economía e Industria. En los últimos días del corriente mes -27 y 28 de mayo-, los equipos técnicos de ambos gobiernos volverán a reunirse para analizar en profundidad la situación del complejo automotor-autopartista en su conjunto.
Se prevé armonizar un nuevo protocolo automotor (actualmente prorrogado tras su vencimiento) que permita un mayor equilibrio en la balanza comercial del sector automotriz entre la Argentina y Brasil.
Las empresas, además, expusieron las situaciones particulares que atraviesan, y ante la disparidad de coyunturas acordaron con el Gobierno iniciar la semana próxima una ronda de reuniones con los directivos de cada automotriz.
En estos encuentros, explicaron las mismas fuentes, se podrá abordar en detalle la pretensión del Gobierno de acordar con las empresas una adecuación de los precios de los distintos modelos de cada marca, atendiendo la evolución de sus costos desde el 1 de enero y atendiendo las variables que influyeron desde entonces.
Las reuniones del Gobierno con las terminales se vienen sucediendo desde el 1ro de marzo último, cuando la presidenta Cristina Fernández, en la apertura del nuevo período legislativo, convocó a las automotrices a analizar la situación del sector ante el aumento de precios de los 0 kilómetro y su consecuente caída de ventas.
Las terminales locales atribuyen la caída de ventas al impacto de la nueva alícuota de impuestos internos (que afecta a menos del 5 por ciento del total de ventas de 2013) y al efecto de la adecuación cambiaria de fines de enero.