Los investigadores de la Oficina de Derechos Humanos de la Comisión Nacional de Valores (CNV) ya describieron cómo las corporaciones impusieron a los militares las leyes que debían sancionar. Ahora centrarán su tarea en desentrañar cómo esos mismos grupos económicos se consolidaron en las dos décadas que siguieron a la última dictadura. “Son los grupos que se consolidaron como los Capitanes de la Industria, donde estaba Bunge y Born”, detalló el sociólogo Walter Bosisio, quien abordará la tarea junto al historiador Bruno Nápoli.
La tarea incluye analizar “qué pasó con la masa salarial dentro de las empresas durante la última dictadura” para entender cómo esa masa de dinero se volcó al mercado. “Se trata del accionar de grupos económicos que le sacaron a los trabajadores y la utilizaron para la especulación. Son grupos que intervinieron en la economía y limitaron la democracia en los 80 y en los 90”, completó Nápoli.
Uno de los datos que permite mostrar hasta dónde los grupos que participaron de la dictadura siguieron maniobrando en democracia es que los integrantes del directorio cívico-militar de la CNV, nombrados por Jorge Rafael Videla y que debía regular el mercado de capitales, continuaron en sus puestos hasta agosto de 1988. Ese fue uno de los descubrimientos que más sorprendieron a Bosisio y Nápoli, quienes junto con la antropóloga Celeste Perosino elaboraron el informe “Economía, Política y Sistema Financiero – La última dictadura cívico militar en la CNV”.
Ese trabajo será continuado con el análisis de qué fue lo que ocurrió en las dos décadas que siguieron a la última dictadura. “Se viene discutiendo en ámbitos académicos qué fue lo que pasó con el ingreso y cómo se distribuyó. Poco antes del inicio de la política económica de José Alfredo Martinez de Hoz, en 1975, la diferencia entre el decil superior y el inferior era de 15 veces –la diferencia entre el que más gana y el que menos gana- y terminado ese proceso la distancia se amplió muchísimo”, explicó Bosisio.
“Se pusieron una serie de operatorias económicas, como alta inflación con congelamiento de salarios, que permitieron la redistribución del ingreso. Pero eso hay que analizarlo en concreto en los balances de las distintas empresas para ver cómo se plasmó hacia el interior”, agregó.
Lo que Bosisio y Nápoli intentarán desentrañar es cómo fue que “se profundizó” el modelo económico que dejó la dictadura. “Hubo un reagrupamiento de esos grupos que se terminan consolidando en los 90 porque si hubiera habido un corte en esa política no hubieran llegado. Pero esos grupos económicos llegaron a los 90, reagrupados y muy fuertes”, señaló Nápoli.
“Entonces, los hombres de las corporaciones ocuparon puestos claves en la economía como Miguel Angel Roig, Néstor Rapanelli, los Alsogaray y Domingo Cavallo, con la Fundación Mediterránea”, completó el historiador. Lo que existió en todo ese período –según la hipótesis de trabajo- fue un proceso de acumulación y centralización del capital, que intentarán demostrar con datos concretos de las distintas empresas.