Italia se convirtió en el 16º país de la Unión Europea en prohibir en algunos casos y restringir en otros el uso de pesticidas. La medida viene de 70 municipios bajo el impulso de miles de ciudadanos que quieren vivir en un ambiente más sano.
70 municipios italianos reglamentaron la semana pasada una gran noticia para su país: la prohibición de pesticidas en jardines públicos, árboles y flores, pero sobretodo cerca de parques públicos y escuelas. Como también la ayuda concreta a quienes, en las aŕeas agrícolas periurbanas, quieren cultivar sin recurrir a la química sintética.
Este país, ya tomó medidas en algunos municipios como el de Vallarsa en la región de Trento, donde aquellos que no cultivan de manera orgánica deben activar una póliza de seguros para la compensación de gastos y daños causados por la contaminación provocados por su actividad.
El programa “Libre de Pesticidas: Italia comienza desde los municipios”, organizado por las ONG, WWF y Médicos por el Ambiente, en coordinación con las autoridades nacionales desarrollaron un pliego con solicitudes claras que incluye entre otras medidas: afrontar con adecuados sistemas de monitoreo y control, la dispersión de los pesticidas para garantizar la protección de la población, las redes hídricas y producciones orgánicas que corren el riesgo de ser degradadas en caso de contaminación.
En la Unión Europea son 27 los pesticidas que se espera que los cultivadores dejen de usar. Entre ellos el glifosato, que en muchas regiones ya está prohibido, como en la región de Prato (Italia), muchas zonas de Francia y Alemania. Así como las cadenas de supermercado más grandes de Holanda, Italia, Suiza y Gran Bretaña, ya establecieron requisitos adicionales para el uso de pesticidas por parte de sus proveedores.