El ministro de Economía rechazó los diagnósticos que hablan del sector automotor como “vidriera de una crisis tremebunda que estamos pasando” y destacó que en lo que va de 2014 se patentaron 500 mil vehículos, cifra sólo superada el año pasado y muy por encima de los años anteriores.
Kicillof se refirió, en declaraciones a radio Del Plata, al encuentro que mantuvo ayer la presidenta Cristina Fernández con representantes de las terminales, las concesionarias y los gremios del sector.
El ministro sostuvo que la Secretaría de Comercio recabó gran cantidad de denuncias de “bombeos” e “irregularidades de todo tipo” respecto del plan Procreauto, y atribuyó la falta de entrega de los fabricantes a “especulaciones sobre aumentos de precios y devaluación”.
Ante la “polémica interpretativa” sobre lo que está pasando en el sector, dijo Kicillof, la Presidenta presentó “datos objetivos no desmentidos, por el contrario, confirmados”.
Puntualizó al respecto que “2013 es un año complicado para las comparaciones, porque fue absolutamente récord, con casi un millón de vehículos patentados entre nacionales e importados”.
El titular del Palacio de Hacienda recordó que en 2003 se patentaron 133 mil vehículos, de los cuales 66 mil eran nacionales, contra 957 mil del año pasado, prácticamente 800 mil más.
“La producción -agregó- se multiplicó por cuatro veces y media, de 169 a 791 mil; las exportaciones se cuadruplicaron, de 109 a 449 mil; y el empleo subió de 11.500 a 34 mil trabajadores sólo en las terminales y a 80 mil en todo el sector, lo que evidencia un crecimiento como nunca hubo en la historia”.
“Para poner las cosas en su lugar, 500 mil autos patentados no es de crisis, es superior a todos los años de la serie excepto el año pasado”, insistió el ministro.
Consideró luego que los empresarios estuvieron en la reunión “flojos de papeles: no había argumentos”, si bien admitió que en comparación con el año pasado las ventas bajaron algo más de 20%.
“Sí cayeron las ventas a Brasil, donde la economía está en una situación compleja, y el gobierno hizo esfuerzos para dialogar y ponernos de acuerdo en mantener la participación de mercado”, dijo.
Para paliar ese descenso, añadió, se creó el plan Procreauto, que involucra a 42 modelos, y ya lleva 30 mil solicitudes y 15 mil vehículos otorgados.
El programa, sostuvo, buscó aumentar las ventas, luego de que las terminales aplicaran en enero y febrero “aumentos de 40%, por encima del corrimiento cambiario y de la suba de salarios”, mientras las propias financieras de las propias automotrices dispusieron “tasas usurarias de 80%”.
Así, dijo Kicillof, las ventas de autos cayeron porque “la gente no come vidrio y no va a pagar precios galácticos”.
El ministro cuestionó, por último, una encuesta de la empresa Fiat que incentivaba a su red de concesionarios a rechazar el plan Procreauto, que “está siendo un éxito para el consumidor”.