En septiembre de 2024, la industria argentina alcanzó una utilización de la capacidad instalada del 62,4%, por debajo del 67,9% registrado en el mismo mes del año anterior. Este descenso interanual refleja la disminución en la actividad de diversos sectores clave, según un informe reciente sobre el desempeño industrial.
Algunos bloques sectoriales lograron ubicarse por encima del promedio general del 62,4%, destacando en particular la refinación del petróleo, que lidera con un 80,8% de utilización. Le siguen las industrias metálicas básicas (72,4%), papel y cartón (68,3%), productos alimenticios y bebidas (68,2%), sustancias y productos químicos (65,7%) y productos minerales no metálicos (64,2%).
Entre los sectores que no alcanzaron el promedio general, la industria automotriz presentó una utilización del 59,6%, seguida por edición e impresión (56,1%), productos textiles (51,3%) y productos de caucho y plástico (49,9%). Los sectores con menor nivel de utilización fueron productos del tabaco (48,7%) y metalmecánica, excepto automotores (43,9%).
Incidencias negativas: sectores en declive
La caída de la actividad en varios sectores estratégicos fue notable en septiembre. Por ejemplo, el segmento de sustancias y productos químicos registró una capacidad de 65,7%, significativamente menor que el 75,5% del mismo mes en 2023, lo cual responde a una baja en la producción de materias primas plásticas.
Por otro lado, las industrias metálicas básicas alcanzaron un 72,4%, frente al 85% de septiembre del año pasado, con una caída interanual del 17,1% en la producción de acero crudo, de acuerdo con la Cámara Argentina del Acero. Otro sector fuertemente afectado fue el de metalmecánica, excepto automotores, con una utilización de 43,9%, vinculado a menores niveles en la producción de maquinaria agropecuaria y de aparatos domésticos, que registraron caídas del 19,9% y 12,5%, respectivamente, según el Índice de producción industrial manufacturero (IPI manufacturero).
La industria de productos de caucho y plástico también mostró una baja significativa, con una utilización de 49,9% frente al 60% de septiembre de 2023, impactada por la menor producción de manufacturas plásticas y neumáticos. La industria automotriz, por su parte, descendió a un 59,6% en septiembre, comparado con el 68,6% del año anterior, atribuido a una disminución en la fabricación de unidades por las terminales automotrices.
Otro sector que vio una reducción significativa fue el de productos minerales no metálicos, que bajó al 64,2%, en contraste con el 76,3% del año pasado. Este descenso se debió a una baja en la producción de cemento y otros materiales de construcción, la cual presentó una caída del 18,9% en septiembre, mientras que la actividad de la construcción en general mostró una disminución del 24,8% según el indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC).
Incidencias positivas: el impulso de alimentos y bebidas
Un aspecto positivo se observó en el sector de productos alimenticios y bebidas, que incrementó su capacidad instalada al 68,2%, superando el 62,4% del mismo mes en 2023. Este incremento está impulsado principalmente por una mayor molienda de oleaginosas.
En este contexto, la producción de aceite y subproductos de soja exhibió un crecimiento interanual del 115,1% en septiembre y un aumento acumulado del 44,3% en el período enero-septiembre de 2024, según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Este panorama en la capacidad instalada evidencia una dinámica de contrastes en la industria argentina, con sectores que logran mantenerse o incluso crecer, mientras otros enfrentan dificultades ligadas a la baja demanda, disminución de producción y desafíos en la cadena de suministros.