El presidente de la Unión Industrial de General Rodríguez y CEO de la empresa argentina de alimentos “Marolio”, Juan Fera, aseguró a Ser Industria que esta norma “dará garantías de producción, venta y formalidad a muchas empresas”.
Asimismo señaló que la pandemia descentralizó la economía y planteó un panorama optimista para el 2021. Sostuvo que están dados los factores para que nuestro país aumentos las exportaciones.
Además de la pandemia y sus restricciones. ¿Qué nos deja el 2020?
El año arrancó con mucha expectativa. El consumo interno se había reactivado y se notaba en el nivel de productos que se estaba vendiendo, pero de repente llegó la pandemia que nos descolocó a todos, más que nada por la incertidumbre. Pensábamos que sería algo de 15 o 20 días y no fue así. Los sectores esenciales no pudimos parar, tuvimos que adaptarnos rápidamente a los protocolos para no generar desabastecimiento y la industria de la alimentación jugó un rol muy importante. Supo estar a la altura de las circunstancias porque en plena pandemia, donde todo el mundo salió desesperadamente a buscar productos, la industria de la alimentación supo abastecer, no hubo descontrol de precios. Se hizo un gran acuerdo con el Estado.
¿Ya se normalizó la producción industrial?
Después de los primeros meses, el tema de pandemia se fue aflojando y comenzó la reactivación de las todas las industrias. Hoy viene bastante bien, estamos en muy buenos niveles, por encima de prepandemia en algunos casos y con expectativas de la llegada de la vacuna para poder empezar una normalidad esperando volver a situaciones anteriores. Hay mucha esperanza, estamos convencidos que reactivar la pequeña y mediana empresa para el consumo interno es fundamental y este es el camino que se está llevando. Hay muchos programas… el gobierno hizo mucha asistencia para que la industria siga sosteniéndose: ATP, refinanciación de deudas, IFE…así que estamos esperando que termine el 2020 y volver a trabajar, como nos gusta a todos los industriales, hacia el crecimiento.
Hubo también una buena respuesta de la cadena logística…
Todo el sector, tanto industrial como comercial, hizo que en toda la Argentina se pudiera seguir consumiendo productos de alimentación sin escalada de precios. Se trabajó muy bien al ir liberando de a poco, creo que se hizo en el momento justo y la respuesta tanto de los industriales como de los comercios fue superior a la esperada.
¿Es una señal de fortaleza que en medio de la pandemia Marolio empezó a exportar a Chile?
Empezamos a exportar pastas a varios países. Hacia Chile se hizo la primera con nuestra propia marca y para nosotros fue como un hito, sumamente importante. Ahora estamos cerrando un buen acuerdo en Uruguay. Seguimos trabajando y en plena pandemia inauguramos una línea de envasado, una fraccionadora de harina, que era algo que estaba proyectado y que íbamos a esperar. Pero nos pusimos las pilas los trabajadores y trabajadoras de la empresa, sin técnicos ni ingenieros que pudieran viajar de afuera. Lo hicimos vía telefónica, por whatsapp, imágenes y videos. Como siempre digo, los colaboradores, con un enorme esfuerzo, pudieron poner esa línea en marcha para seguir llevando harina en paquetes a la población. Desde Marolio se trabajó mucho este año, con cuidados, con temores, con mucha tensión… Con poca información sobre el virus tuve que firmar los permisos para nuestra gente, la que trabaja junto a nosotros día a día. Por suerte tuvimos pocos contagios, nada grave.
Este semana se conoció la reglamentación de la Ley de Góndolas. ¿Cuál es tu opinión al respecto?
Es una gran noticia, es un acceso para las PyMEs y las economías populares a un mercado que era técnicamente inaccesible, que les va a dar garantías de producción, venta y formalidad a muchas empresas. Poder hacer marca, poder trabajar en eso. Es una alegría enorme y una gran oportunidad para que los precios se empiecen a autorregular, Todos sabemos que, a mayor competencia, mayor regulación de precios. El consumidor va a tener más opciones y creo que este es el camino de la apertura económica y una competencia que en algunos casos no se daba. Siempre digo que es muy difícil para una PyME cuando produce en un mes lo mismo que nosotros en un día. Esta es una oportunidad para que el consumidor elija la marca que quiera llevar.
¿Contempla a todo el sector de alimentos?
Sí, también a los artículos de limpieza, es muy amplia. Muchos me dijeron que va en contra de mi propia empresa, pero creo que la competencia es lo mejor que nos puede suceder, nos va a hacer mejorar a todos y va a generar fuentes de trabajo, que es nuestra responsabilidad.
¿Cómo se va a trabajar la logística y la producción de esos productos?
Al principio va a costar, va a ser difícil, pero se van a ir adaptando. Es como la primera exportación. Cuesta, uno tiene miedo, pero después se sigue haciendo y continúa. Las cámaras sectoriales y territoriales estamos para acompañar esos procesos.
¿Crecieron las economías regionales en pandemia?
Lo primero que pasó fue que se descentralizó la economía. Eso es muy bueno. Regionalmente se movió mucho más la economía, el interior está más fuerte. Creo que dentro de todo lo malo que pasó por la pandemia se generaron nuevas oportunidades que marcan tendencias. Yo hablo mucho con el interior, están muy bien. Tenemos algún problema de desabastecimiento de materias primas básicas que ya estamos trabajando para generar una solución, pero creo que vienen un país y un mundo diferentes. Van a cambiar muchas cosas. El microcentro no va a ser más lo que era, con lo cual habrá una readaptación de los locales, los comercios, porque el teletrabajo llegó. Considero que esta descentralización es mucho mejor para el país.
¿Cómo ves la posibilidad de que Argentina incremente sus exportaciones?
En plena pandemia, cuando me preguntaban que creía que podía pasar, siempre dije lo mismo: Argentina va a salir bien parada porque el precio de los commodities va a subir. Y eso fue lo que pasó. Hoy tenemos valores de soja y trigo muy competitivos, estamos bien con los valores de la industria para la exportación. Falta que el mundo se reactive, pero veo un buen 2021. Tenemos que dejar de hablar del dólar blue. Todos los precios de nuestra economía son por el dólar oficial. Sólo los “vivos” usan el blue para marcar precios. Las exportaciones argentinas van a aumentar, todos los factores están dados para que pase eso. Tenemos la mejor mano de obra del mundo. Yo recorro plantas y los trabajos que se hacen acá son muy buenos. Entonces tengo mucha esperanza, hay que pensar en una transformación y tanto los empresarios como el gobierno consideran que la industria es la salida.