La semana cerró con un fuerte aumento del dólar blue, que llegó a los 338 pesos, la suba del Riesgo País (2.899 puntos) y un clima de incertidumbre que llevó a limitar parte de la actividad comercial, debido a las dificultades para fijar precios. Por su parte, el Presidente Alberto Fernández, apuntó al campo al señalar que “guardan US$ 20.000 millones y no los liquidan cuando el país los necesita”
En ese contexto, Ser Industria Radio dialogó con Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), quien desde la ciudad de Suipacha afirmó que “la responsabilidad de la situación lamentable que vive el país es de quienes gobiernan”.
Además, sostuvo que “hay que nivelar una macroeconomía totalmente distorsionada” y que 2022 es, de los últimos veinte años, cuando más liquidó el sector. “Si el gobierno en una mala praxis, ha agotado las reservas, es otra cuestión”, afirmó.
¿Cuál es tu reflexión sobre el mensaje del Presidente?
Primero hay que aclarar una situación: el país se encuentra en una situación angustiante para todos los argentinos y no es culpa de nuestro sector. Parece que el Presidente mira para un costado y dice ¿a quién le echo la culpa? En realidad, gobierna la alianza que hicieron el Presidente y el Vicepresidenta de la República. Eso tiene que ser muy claro. La responsabilidad de la situación lamentable que vive el país es de quienes gobiernan. Por otro lado, el Presidente equivoca las cuestiones. Mirando un cuadro económico de las liquidaciones del sector agropecuario en los primeros semestres de cada año, los dos semestres más altos fueron 2011 y 2012, cuando gobernaba el kirchnerismo. Los otros que han superado fueron el 2021 y 2022, que casi duplica a otros. De los últimos veinte años, éste es en el más se liquidó. Si el gobierno en una mala praxis, ha agotado las reservas, es otra cuestión. Ningún sector de la economía argentina al que le digan “usted tiene que vender lo suyo y quedarse en pesos”, va a hacerlo. Ni el asalariado que tiene que guardar y buscar un refugio en otra moneda, ni los comerciantes, profesionales, industriales. Nadie comercializa mercaderías si no tiene posibilidad de reconvertir y no quedarse en pesos. Y si se considera el valor que liquida el productor, hoy a $89 el valor de la soja, el productor agrícola guarda su producto, porque en septiembre tiene que empezar a comprar y pagar todos los insumos para volver a invertir. Si liquida hoy, se queda en pesos. ¿Y qué compra en septiembre? ¿La mitad de las cosas? El refugio del productor para volver a invertir, es mantenerse en la mercadería. Esto ha pasado históricamente, porque vende en ese momento o canjea, que es muy común en la producción agropecuaria. En esta Argentina hay una inseguridad total. El productor vuelve a enterrar la plata y está guardando para volver a producir.
¿El mecanismo de canje se ha acentuado porque la economía empeora?
El canje es histórico. Muchos de los que venden insumos, para agilizar la operación, entregan kilos de soja o cualquier otra mercadería y el insumo va referenciado a un valor. Es una práctica muy común. Tenés que tener el grano para eso. Si te quedaste en pesos, la semana que viene los precios son distintos. Imaginate en grandes inversiones lo que se puede perder, significaría para un productor, posiblemente, tener que prescindir del 20% de la siembra por no contar el dinero para los insumos.
En pocas horas el gobierno habló de acordar con todos los sectores y luego arremetió contra el campo y la oposición. ¿Qué pensás al respecto?
También escuché al gobernador Kicillof atacar a la oposición y el día anterior había dicho que había que acordar con ellos. Es increíble cómo hacen las cosas, insólito. Pareciera que las ganas de enfrentar superan la necesidad de acordar. El Presidente, en lugar de ser más abierto, buscar herramientas, convocarnos, ver cómo se aborda la situación, señala con un dedo. Y arriba de todo esto, la directora de la AFIP dice que tienen geolocalizados todos los bolsones. ¿Es una amenaza? En esta situación habría que salir desde la empatía, no desde el enfrentamiento y la acusación.
¿Si el gobierno los convoca a dialogar, están dispuestos o creen que la situación no da para más?
Hay algo muy simple y delicado, la alianza gobernante no tiene acuerdos políticos. Al momento de sentarse a negociar, ¿con quién habría que hacerlo? Mañana podemos sentarnos con el Presidente, pero tiene un poder, lamentablemente, relativo. Hay otros sectores de su alianza que también deberían opinar. ¿La persona que me recibe tiene el poder necesario para acordar algo? No se toma una medida económica si no hay un acuerdo político, esa es la base y lo que da credibilidad.
¿Qué medidas urgentes deberían tomarse para recuperar credibilidad y normalidad en el año y medio que queda de gestión?
Está distorsionada la macroeconomía y cuando eso sucede, siempre llega a la microeconomía. Hablamos del tipo de cambio, el nivel de inflación, la tasa de interés…Primero tenés que tener credibilidad y después abordar medidas que muchas veces no son demasiado simpáticas. Hay que abrir un plan de transición que diga que van a utilizar estas reglas de acá hasta diciembre del año que viene. Más allá de la propuesta que se haga en base a las elecciones del 2023, hay que nivelar una macroeconomía totalmente distorsionada. Como se deben tomar decisiones que no son demasiado simpáticas, nadie quiere que le pongan el mote en el gobierno, de haber sido quien tomó la medida y entonces vamos a la deriva. La base de la cuestión económica es la credibilidad de quien las toma. Si viene el Presidente con el acuerdo político para una medida, ok, se hace. Pero si el que debe acordar duda… Es la angustia de la situación que vive el país. Argentina no está para estas cosas y la región no está en crisis, nosotros tenemos una situación social sumamente compleja.
¿Es un problema más político que económico?
No, hay un problema económico muy fuerte porque ha habido una mala praxis tremenda, pero si no hay poder político no se resuelven los temas económicos. Hay que arrancar con lo político y lo económico, no es nada fácil, pero si no arrancás con lo político, olvídate.
¿La provisión de combustible en el campo, ya está solucionada?
Por el momento está liberada. Hay que reconocer que el sector ha dejado de consumir bastante porque quedó pendiente un poco la cosecha de maíz y nada más, se terminó con trigo y cebada y hasta septiembre no se arranca con la gruesa. No va a haber una necesidad muy grande, me parece que es un equilibrio muy finito.
Si la situación económica empeora, ¿la inversión en el campo, podría disminuir?
Te diría que no. El productor sigue apostando y generando. Por supuesto que, si las situaciones son desequilibradas, como pasó con el trigo que manosearon su comercialización, se siembra menos. El tema fundamental es ponernos de acuerdo con las reglas de juego. Con el trigo metieron un cupo para la exportación y además fideicomiso a la operación. Entonces así es muy difícil trabajar. El sector va a apostar si hay reglas claras.
