El presidente de la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (CEPBA), Guillermo Siro remarcó que “en la segunda quincena de enero mejorarán la afluencia turística y la actividad. No tengo dudas que será mejor, porque en comparación con enero del 2023, cualquier indicador será positivo”.
“Cabe recordar que hace un año estuvo muy complicado y por debajo de las expectativas porque veníamos de una devaluación y el arrastre de una inflación, donde prácticamente no había precios ni costos de reposición”, agregó el dirigente.
En declaraciones al Canal Crónica TV, Siro también señaló que “está en claro que habrá gente que se va a Brasil, pero no todos pueden hacerlo o prefieren vacacionar en la costa Atlántica y esto se verá a partir de la segunda quincena”.
Seguidamente, explicó que “no es normal que a los argentinos les salga muy barato comprar o hacer turismo en cualquier país, si bien hay que recordar que en muchos casos y por cuestiones de coyuntura, había un sólo país que devaluaba, como Brasil, pero los otros, no. Hoy por hoy estamos con una situación en la cual hemos tenido una inflación, en dólares, de aproximadamente el 70% en el primer trimestre del 2023”. Añadió que “teníamos un dólar de 1,300 pesos que hoy, prácticamente tiene el mismo valor”.
Impuestos y competitividad
En el mismo orden, Siro afirmó que “el sector necesita una mano de quienes gobiernan”, resaltando el apoyo de CEPBA a la medida del gobierno provincial “de suspender los beneficios de la cuenta DNI del Banco Provincia, que se redujo al territorio bonaerense, ampliándolo en la costa Atlántica y zonas turísticas”.
No obstante, también criticó al gobierno de la provincia de Buenos Aires porque “tiene la más alta presión impositiva del país y a esta situación de fijar altos impuestos tampoco escapan la administración nacional, ni los municipios en general”.
Por último, solicitó un “aggiornamiento” en materia laboral que “no debe entenderse como una reforma” sino una corrección en ese sentido, dado que “estamos pagando el doble de costos por cada puesto de trabajo y esto, sumado a los altísimos impuestos, nos deja afuera de toda condición de competitividad”.