Luego de recibir la conciliación obligatoria por parte de las autoridades de la Secretaría de Trabajo, la Federación Sindical Marítima y Fluvial (FESIMAF) ordenó que se levante el cese total de actividades que afectaba a los servicios de los puertos argentinos.
La decisión de parar la tomaron ante la falta de un acuerdo paritario con la Cámara Argentina de Remolcadores (CAR). La misma, contó con el respaldo y la adhesión de la Asociación Profesional de Capitanes y Baqueanos Fluviales de la Marina Mercante, el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo y el Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales, entre otras organizaciones gremiales.
En este sentido, el secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje, Mariano Moreno, había manifestado que la CAR no estuvo dispuesta a reunirse con los gremios para discutir las paritarias. Esta situación fue la causa del cese de actividades que había comenzado a las 00 horas de este jueves.
Asimismo, Moreno explicó que en esa instancia no hubo “ninguna propuesta respetuosa de la patronal para los trabajadores”. Luego de dos meses del inicio de la negociación y ante la rotunda negativa de la CAR, no tuvieron otra opción que el paro.
Además, el sindicalista señaló que la semana pasada recorrió los distintos puertos argentinos para poner al tanto de la situación a los trabajadores a cargo del remolque portuario. Al respecto, se les comunicaron los “riesgos” que enfrenta el sector debido tanto a la Ley de Bases como al Decreto 70/23, además de los fuertes rumores sobre una posible apertura de la Ley de Cabotaje, que tendría un grave impacto en la actividad.