El fondo de inversión Southern Cross, controlado por Norberto Morita, completó la compra de la naviera argentina Ultrapetrol.
La operación significa el retiro de la Argentina del grupo Menéndez Ross, con partida de nacimiento en Chile. En 2012 Southern Cross ya había desembolsado US$ 220 millones para tomar el 75%, la mayoría accionaria de la compañía que, además de ser una de las principales transportadoras de la Hidrovía, posee un astillero propio en Punta Alvear. Allí, cerca de Rosario, se fabrican y exportan remolcadores y plataformas fluviales.
Ultrapetrol con una facturación que orilla US$ 305 millones se hizo fuerte en el transporte fluvial en la hidrovía Paraná-Río de la Plata, los servicios logísticos a empresas petroleras y los fletes interoceánicos de cargas generales. También se expandió a Paraguay, Uruguay y Brasil.
El astillero de Punta Alvear tiene una capacidad de fabricación de dos plataformas fluviales por semana y exporta barcazas a distintos mercados de la región como Colombia.
El fondo Southern Cross debutó en 1998 luego de que Morita dejara su cargo como CEO del grupo Bemberg. Entre sus adquisiciones de las que luego se desprendió estuvieron Juncadella, la cadena de tiendas chilena La Polar, los laboratorios Northia y la petrolera CGC.
Junto con Ultrapetrol, el fondo también adquirió el año pasado la mayoría accionaria de la Sociedad Portuaria Regional de Barranquilla (SPRB), que controla uno de los principales puertos de cargas de Colombia.