“Nuestro gran problema en Latinoamérica es la inversión y el ahorro”, destacó la seretaria ejecutica de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), Alicia Bárcena en la apertura del segundo foro económico Europa-Latinoamérica, organizado en la sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en París.
“El crecimiento del 2,7% esperado para este año en la región se apoya esencialmente en el consumo, no en el comercio y menos todavía en la inversión”, destacó. La funcionaria insistió en que el gran problema de Latinoamérica de ser la zona del mundo con mayores desigualdades lleva aparejado otro que es el de una baja productividad.
Al respecto, estimó que corregir las carencias en el terreno de la innovación y del escaso peso de los sectores tecnológicos va de la mano de la disminución de las desigualdades sociales, lo que exige “una nueva ecuación entre el Estado, el mercado y la sociedad”.
En su exposición, remarcó la convicción de la Cepal de que “la igualdad es un vector del crecimiento”, y aunque admitió que en la región disminuyó la pobreza, eso “no es suficiente” porque no se está solucionando la fractura en la distribución de los ingresos.
También se refirió a “tres barreras estructurales” ante esa cuestión, que son la “vulnerabilidad exterior”, “la baja productividad de la gran masa de pymes -que suponen la inmensa mayoría del empleo, aunque contribuyen poco al Producto Interior Bruto (PIB)-, y “la debilidad de nuestro marco institucional”.
Por su parte, el secretario general de la OCDE, Angel Gurría, indicó que los europeos y los latinoamericanos afrontan una serie de retos comunes actualmente en la salida de la crisis.
Entre esos retos, mencionó conseguir un “crecimiento incluyente”, que proporcione mejores estándares de vida para todo el mundo.
Gurría consideró que “ambas regiones necesitan reformas estructurales”, reforzar su competitividad y crear nuevas oportunidades para los que se incorporan al mercado de trabajo y a los que están desempleados.
El anfitrión del foro económico, que reúne hoy y mañana a expertos y a académicos de ambos lados del Atlántico, recordó algunos avances constatados en Latinoamérica en los últimos años. En esa línea destacó que unos 60 millones de personas hayan salido de la pobreza entre 2002 y 2013, en particular en Brasil, y que haya emergido una clase media más numerosa.
Frente a eso, comentó que “Europa está sólo ahora gradualmente empezando a crecer” y “se siguen destruyendo empleos en algunos países de la zona euro”, donde el desempleo juvenil llega al 50%.