El gremio portuario dispuso un paro por tiempo indeterminado afectando tareas de amarre y desamarre de las terminales de Nidera, Toepfer, Bunge y Noble. La medida rompió la tregua acordada con el Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich en la disputa intersindical por un puerto flotante.
La instalación de un transbordador de mercaderías del gigante brasilero Vale a la altura de Arroyo Seco, en el kilómetro 392 del Río Paraná, generó la resistencia de la CGT San Lorenzo y un conflicto entre el Sindicato Unido Portuarios Argentinos (SUPA) y el de Obreros Marítimos Unidos (SOMU).
El conflicto amenazaba con afectar el normal funcionamiento de los puertos durante los meses de cosecha gruesa cuando se registra un altísimo tránsito fluvial.
Las tensiones entre los dos sindicatos, que no lograron destrabar los Ministerios de Trabajo tanto provincial como nacional, obligó a Capitanich a intervenir.
Fue entonces que el 17 de abril pasado, ambos sindicato reunidos en Casa de Gobierno, pactaron frente a Capitanich una tregua por 4 meses.
La ruptura de la tregua por parte del SOMU, que decretó un paro por tiempo indeterminado del personal que cumple tareas en los remolcadores, dejando inoperable las terminales de Nidera, Toepfer, Bunge y Noble y a más de 20 buques cerealeros que esperaban cargar enfureció a Capitanich quien citó de urgencia a Herme Juárez.
El dirigente viajó a media tarde de ayer en el helicóptero de la Cooperativa Portuaria. En conversaciones con Lapolítica Online negó tener responsabilidades en la medida: “No se por qué me citan a mí y no a Suarez” sostuvo Juárez en alusión a Omar Suárez, Secretario General del SOMU.
“El SUPA no tiene nada que ver con la medida ilegítima que tomó el gremio de Obreros Marítimos. No fuimos quienes rompimos la tregua y nuestras terminales están funcionando normalmente” afirmó Juárez quien acusó a la empresa UABL de trasladar la plataforma flotante a la altura de Arroyo Seco para evitar los controles en seguridad e higiene que se exigen en la jurisdicción de Juárez.
En esta oportunidad, la intervención de Capitanich no pudo destrabar el conflicto y se calculan que se podrían afectar a más de 100 embarcaciones y pérdidas por más de 10 millones de dólares.
La minera Vale en el ojo de la tormenta
El traslado del puerto flotante de la multinacional Vale desde las costas de Puerto San Martín a Arroyo Seco generó el conflicto inter sindical.
Desde el SUPA denunciaron que la minera busca fondear el transbordador de minerales en el kilómetro 392 del río, alejado de los controles que el sindicato de estibadores impone y poder así contratar mano de obra precarizada.
“Lo que pretende UABL (el grupo de transporte fluvial que opera las barcazas que utiliza Vale) es evadir los controles en seguridad que se deben tener en este rubro y eso es lo que estamos denunciando” sostuvo Herme Juárez.
El dirigente gremial agregó: “Se está transportando materiales de las minas en barcaza hasta San Lorenzo, esto constituye un peligro en potencia. Las barcazas pasan por debajo del puente Rosario-Victoria y eso atenta contra las normas internacionales”
Por su parte, la CGT San Lorenzo también apoyó el reclamo del SUPA y reconoció el peligro de operar a la altura de Arroyo Seco: ” pretenden operar en una zona donde el tránsito de barcos ultramarinos es fluido y con más razón en ésta época de cosecha con el riesgo que ello implica en cuanto a la seguridad de la navegación se refiere” afirmaban en un comunicado.