La Federación Sindical Marítima y Fluvial (FESIMAF) anunció que desde las 00 horas del jueves 6 de junio hasta el último minuto del día siguiente, se realizará un cese total de actividades que afectará a los servicios de los puertos argentinos. No obstante, el sector gremial expresó que cubrirá la atención de los barcos metaneros o gaseros para garantizar esa provisión a los ciudadanos.
La medida fue tomada ante la falta de un acuerdo paritario con la Cámara Argentina de Remolcadores (CAR). Cuenta con el respaldo y la adhesión de la Asociación Profesional de Capitanes y Baqueanos Fluviales de la Marina Mercante, el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo y el Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales, entre otras organizaciones gremiales.
Al respecto Ser Industria se comunicó con Mariano Moreno, secretario general del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje. El dirigente manifestó que “iniciamos las negociaciones paritarias donde encontramos poca y nula predisposición de la Cámara Argentina de Remolcadores, que desde un primer momento se negó a mantener reuniones con los gremios, por lo que tuvimos que pedirle al ministerio de Trabajo que convocara a las partes”.
Indicó que en esa instancia “no hubo ninguna propuesta respetuosa de la patronal para los trabajadores y habiendo transcurrido dos meses del inicio de la negociación y ante la rotunda negativa de la Cámara, no nos queda otra que pasar a estas medidas de acción directa”.
Servicios garantizados
Moreno aclaró que “los gremios hemos decidido que esta medida no afecte a los buques metaneros o gaseros, para evitar inconvenientes a la población que se vería perjudicada si estos barcos no tienen la posibilidad de alcanzar los puertos y operar como corresponde”.
“Como dije anteriormente, agotamos las instancias de negociación, lamentablemente pasamos a esta etapa, pero tratamos de afectar lo menos posible a los ciudadanos, al pueblo, que también está atravesando situaciones críticas tanto en lo económico como en muchas cuestiones sociales“, agregó.
Volviendo al conflicto, señaló que la semana pasada “recorrimos todos los puertos donde tenemos compañeros desarrollando la actividad del remolque portuario. Dialogamos y les explicamos la situación para concientizarlos acerca de esta problemática y aprovechamos esas reuniones para comunicarles los riesgos que tenemos por delante“.
En ese sentido, hizo mención a los proyectos impulsados por el Poder Ejecutivo Nacional. “Nos referimos tanto a la Ley Bases, como el Decreto 70/23 y los fuertes rumores de una apertura de la Ley de Cabotaje, que nos dejaría en una situación crítica”.