Alberto Roberti, secretario general de la Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles, advirtió que el suministro de gas se verá afectado desde mañana y los usuarios residenciales sufrirán la escasez en medio de las bajas temperaturas.
Representantes de las empresas en conflicto (Shell, Total e YPF) se reunirán en el Ministerio de Trabajo que conduce Carlos Tomada, tras una convocatoria oficial para intentar destrabar la situación y evitar el desabastecimiento del combustible.
El paro fue anunciado por la Federación en las últimas horas de ayer después de dos meses de conflicto en el que, según Roberti, las empresas no hicieron “ninguna oferta” de aumento salarial y el ministerio de Trabajo sólo dictó conciliaciones obligatorias.
El sindicalista indicó que la garrafa social, por ejemplo, salió del “precio corset” de 16 pesos y ahora tiene una variante que llega hasta los 97 pesos, por lo que las empresas tienen la libertad de no estar atrapadas como antes en los subsidios.
“Parece insólito que no puedan ajustar los salarios de los trabajadores. Pedimos 32% de aumento, dado que las mediciones propias de inflación alcanzan al 30%. Más un nuevo convenio colectivo de trabajo que viene con demoras desde hace tres años”, dijo Roberti.
El sindicalista y diputado indicó que el paro es por tiempo indeterminado por razones de seguridad, porque “esto no es una fábrica de caramelos” y el gas no se puede acopiar ni guardar así que “los compañeros volverán al trabajo cuando se resuelva el conflicto salarial”.