Marcada por la tradición radical de su familia e impulsada por la mística del partido que, en 1983 con Raúl Alfonsín, integró el primer gobierno democrático tras la dictadura militar, Manuela Forneris, a sus 33 años, compartió en Ser Industria Radio su recorrido como concejala de la ciudad de La Plata por la UCR y reflexionó sobre los desafíos que ha enfrentado en un escenario político complejo.
Ya en su tercer año en el Concejo Deliberante, la joven dirigente y docente, repasó sus primeros pasos como legisladora municipal en los que aprendió a convivir con los tiempos de la política, lejos del impulso juvenil. Además, se refirió a la renovación del partido centenario en la capital bonaerense.
Actualmente, como presidenta de la Comisión de Ambiente, impulsa medidas que fomenten la transición energética para construir una urbe más sostenible. Marcan su agenda proyectos para los grandes generadores de residuos y beneficios a empresas que inviertan en energías limpias. Pero también, busca aliviar la carga impositiva para que las PyMEs y los comercios puedan mantener sus puertas abiertas y no despidan personal.
Tuviste dos años de mandato como oficialista y ahora te toca el lugar de la oposición. ¿Cómo es la experiencia?
Así es, llegué cuando Cambiemos gobernaba la ciudad y en 2023 el electorado eligió otra opción. Vengo de militar en el territorio, clubes, instituciones, distintos barrios, con una actividad más de tinte social y llegué con proyectos, ideas, ganas de cambiar la realidad. Pero no voy a mentir, es un ámbito complejo, con una dinámica súper diferente a la que trae un militante. Pude adaptarme y aprender a tener paciencia, entender los tiempos de la política, que es lo que más ansiedad me generó. Actualmente conformamos un nuevo bloque con concejales radicales y Melany Horomadiuk del Pro. Estos tres años fueron muy diversos, dinámicos y cambiantes. Siempre tratando de no perder el foco, de tener presente para qué estamos y llegamos a estos lugares. El bloque es de mucho diálogo, pensando por la propositiva de tratar de conseguir lo mejor para la ciudad.
¿Te desilusionó la política?
No sé si esa sería la palabra. Mi primer año fue de mucho enojo. Llegué con mucho empuje, con energía y después la dinámica de la política es otra. Requiere mucho diálogo, consenso, sentarse a escuchar, porque somos muchos, de diferentes partidos e ideologías y es un ejercicio poder encontrar el punto que nos permita avanzar. Me resultó complejo, pero no hay que resignarse. En estos tiempos del discurso de la casta, la antipolítica y que la política no sirve para nada, quiero decirle a los jóvenes y a los no tan jóvenes que creo en la política, porque es la verdadera herramienta para transformar la vida de la gente, aunque suene a frase hecha. Estos tiempos requieren que este mensaje quede claro porque si no generamos más odio, resentimiento y desinterés.
¿Qué lugar hay para los jóvenes en la UCR?
En la ciudad de La Plata fue un desafío porque el radicalismo hacía mucho tiempo que no tenía representación juvenil. Era el reclamo de todos los sectores internos para que los dirigentes con enorme trayectoria nos den lugar para acompañar. Somos un partido centenario con gente de muchísima historia, pero también entendemos que es el momento de que empiecen a abrirse puertas para los jóvenes y aprender a convivir. Con el presidente de bloque, Diego Rovella, a quien quiero con todo mi corazón, al principio la adaptación nos resultó difícil. Las generaciones debemos confluir, convivir y nadie debe sentirse amenazado.
El tema ambiental preocupa a muchos jóvenes. ¿Cómo lo abordás desde la Comisión?
Participé de la Comisión de Ambiente siendo miembro simple y este año me toca presidirla. Es una responsabilidad y un orgullo enorme. Es la agenda joven, pero no es prioridad para el oficialismo municipal. En el rol y la responsabilidad que me toca, el tinte que le queremos dar con los concejales y concejalas que integran la comisión es plantear una agenda para que sean prioridad las cuestiones vinculadas al cuidado del ambiente, a hacer una ciudad más sustentable. Estamos trabajando muy bien. Retomamos proyectos que esperaban en la comisión desde hacía tiempo. Un claro ejemplo, en el que trabajamos todos los bloques, fue el de Grandes Generadores de Residuos.
¿Qué plantea?
Es un proyecto de Ordenanza que había ingresado a Comisión en 2022, propuesto por Yanina Lamberti de Unión por la Patria. Planteaba la necesidad de ver qué estaba pasando con los grandes generadores de residuos de la ciudad. Me pareció oportuno empezar a trabajarlo nuevamente. El tema de la basura en La Plata es súper amplio. Hay cuestiones que dependen pura y exclusivamente del Ejecutivo municipal, pero hay legislación provincial que establece que quienes produzcan más de 20 kilogramos o 2000 mililitros de basura por día tienen que tener una planificación respecto a qué van a hacer con ella. También cómo va a ser la separación en origen, cuál va a ser la logística que van a aplicar para que esa basura llegue al destino correspondiente… Por lo tanto, ¿por qué no marcar una agenda al Ejecutivo municipal con una ordenanza que pueda ordenar la legislación provincial?
¿Cómo es tu proyecto para incorporar energías limpias a las industrias?
Presentamos un proyecto que tomó estado parlamentario y se va a trabajar en las comisiones pertinentes. La propuesta es que a las empresas e industrias que decidan invertir en energías renovables, el municipio acompañe generando algún alivio en el pago de la Tasa de Seguridad e Higiene (TSH), que es muy significativa para este sector. Se enmarca en el concepto de articulación entre lo privado y lo público, para avanzar hacia una ciudad más amigable con el ambiente. El proyecto va a estar en las comisiones de Desarrollo y Hacienda. Esperamos que la Agencia Platense de Recaudación (APR) lo pueda evaluar y para avanzar.
En la ciudad las políticas para la sostenibilidad han quedado olvidadas…
Totalmente, nos falta un montón y no están en la agenda del oficialismo. La responsabilidad que tenemos desde nuestro bloque es avanzar con propuestas para generar pequeños y diferentes hábitos. Falta muchísimo por recorrer, pero no hay que bajar los brazos, hay que pensar en lo que podemos aportar desde nuestro espacio. La propuesta para las renovables es muy coherente, muy cuidada y responsable. No es que quien tenga paneles solares se le descuenta el 70% de la THS, nuestra propuesta inicial es del 20%. Esperamos que puedan participar de la comisión los integrantes de APR para encontrar el punto de equilibrio y que la ordenanza salga. Tenemos la responsabilidad de impulsar estos temas que deben ser prioridad para La Plata.
En estos momentos de energía cara, es una buena oportunidad para la empresas…
Cuando hablamos de agenda de ambiente parece como que no se puede combinar con todo lo cotidiano que tenemos. Las empresas están preocupadas mirando las facturas de servicios. Eso pasa también en instituciones que reciben aumentos de 300%. Esta propuesta puede motivar y ayudar desde el estado municipal a los privados y ser una iniciativa que contagie. Arrancamos con PyMEs y podemos pensar otras propuestas y alternativas para los clubes de barrio que están desesperados con esta situación. Estamos en un contexto de mucha dificultad. El gobierno provincial aumenta los impuestos y no encuentra una salida para un montón de problemas coyunturales como la inseguridad, la pobreza. Nación recorta a los jubilados, quita subsidios al transporte, hay problemas con la educación pública y un retroceso en derechos que ya estaban conquistados. En el medio quedan los vecinos y vecinas en una situación que preocupa a todos. Creo que el municipio tiene prioridades desacertadas. Por ejemplo, es importante mejorar las plazas y el espacio público para la calidad de vida de los vecinos, pero ¿qué hacemos con las empresas y los comercios que están cerrando?
¿Se podría pensar en alternativas para aliviar a las empresas con el compromiso que mantengan el personal?
En eso también estamos trabajando. Desde el bloque presentamos un proyecto de ordenanza para considerar algún alivio fiscal también vinculado a la TSH que es la que atormenta tanto a distintos rubros de nuestra ciudad. Lo pensamos entendiendo el contexto que está atravesando la ciudad, donde comercios, negocios gastronómicos e industrias tiene dificultades para mantener al personal. Eso se materializa en familias que se quedan sin trabajo, comercios que cierran y les cuesta doblemente volver a abrir las puertas. Toda esta coyuntura local tiene que ser prioridad de la agenda del intendente municipal.
¿Qué imaginás o soñás para la ciudad?
En estos meses, los sueños para la ciudad mutaron. Venía transitando un sendero con el objetivo bien claro de una ciudad ordenada, segura, en la que el transporte medianamente pueda funcionar. En la que los jóvenes puedan tomarse el micro para ir a la Facultad a cursar y volver sin problemas. Era una ciudad encaminada con algunas cuestiones básicas cubiertas. La coyuntura nacional, la poca colaboración de la provincia y esta nueva gestión en la ciudad hizo que todo cambie. Hubo un retroceso y lo principal para la ciudad es volver a tener cubiertas las necesidades básicas. A La Plata la veo desordenada, con un intendente con las prioridades totalmente cambiadas, un transporte que funciona mal, el sistema de la basura deficiente… Muchas escuelas durante el invierno no tuvieron gas y los chicos no pudieron ir a estudiar. Tampoco tiene toda la responsabilidad del gobierno actual. Soy consciente de que hay problemas estructurales. Para esa ciudad del futuro quiero que las prioridades sean claras, que la ciudad sea ordenada y que pensemos también qué está pasando más allá del casco urbano. El informe del observatorio de la UCALP fue terrible. Es un dato muy dramático que niños de entre 3, 5 y 7 años no coman, ni sepamos si están escolarizados. El momento que estamos atravesando amerita y requiere de mucha responsabilidad, sobre todo de la clase política porque la mano es difícil y hablar de sueños puede resultar egoísta.