En el marco de la Expo Argentina Oil&Gas 2023, se pueden observar importantes novedades y desarrollos industriales emparentados con la sofisticación y la calidad de los productos.Durante la primera jornada de la muestra, Ser Industria dialogó con Lucas Woinilowicz, gerente de Desarrollo de Negocios de la empresa. El ejecutivo se refirió a los avances tecnológicos de los vehículos, tanto camiones como buses y al compromiso de la compañía en la búsqueda de la reducción de la huella de carbono y los múltiples proyectos de producción de biometano en los que trabaja Scania.
¿Qué novedades tecnológicas ofrecen los camiones Scania?
En 2020 Scania presentó su plataforma de productos a gas natural. Para la empresa, la introducción de toda la plataforma de vehículos, tanto buses como camiones a gas, es el primer paso hacia la descarbonización del transporte, lo que llamamos la transición energética. Es comenzar con vehículos a gas para que esa flota que estamos creando, después vaya a funcionar con biometano, que es el gas de origen orgánico.
¿Se utilizará en todo tipo de vehículos?
Tres años después, estamos viendo que el producto no solo ha crecido en la oferta. Cada vez tenemos mayor cantidad de accesorios, estamos llegando a mayor cantidad de aplicaciones, no solo en vehículos a larga distancia. Tenemos camiones hormigoneros, recolectores de basura, para transporte de cargas peligrosas. Hoy todas las petroleras en Argentina o la mayoría de ellas, están utilizando camiones a gas para el transporte de cargas. También avanzamos mucho en buses. En la primera etapa teníamos buses urbanos. Meses atrás, hicimos la presentación de toda la plataforma de buses a gas natural y diésel, tanto urbanos como de media distancia y larga distancia.
¿Cuáles son los nuevos desafíos?
Estamos trabajando en mejorar la performance de las unidades, la versatilidad, agregando rack de cilindros en la parte de atrás de la cabina, para incrementar la autonomía. Tenemos vehículos que pueden llegar hasta 1000, 750 o 500 kilómetros de autonomía, dependiendo de la configuración y el tipo de cilindros que agreguemos. También estamos agregando nuevas protecciones a los cilindros y a las válvulas para camiones que estén operando en zonas donde los caminos son más agresivos con el transporte. Es decir, caminos de ripio, de tierra, de obra, donde vuelan piedras, palos, pueden volar fierros, alambres, lo que sea, que pueden llegar a lastimar los cilindros o las válvulas. Con estas protecciones evitamos esos problemas. El año que viene vamos a presentar un nuevo motor de 460 caballos que va a funcionar siempre con gas natural o con biometano. Es decir, el producto SCANIA sigue evolucionando y el porfolio de soluciones sigue acompañando a nuestros clientes.
¿El 100% de la producción utiliza este tipo de combustible?
No, la transición energética se va a dar en varios frentes. No vamos a salir del diésel de un día para el otro, eso está claro. Y no solo eso, sino que el diésel también tiene todavía muchas oportunidades de mejora para ser un vehículo que contamine menos, que reduzca la huella de carbono. En los próximos años se van a estar introduciendo vehículos con motores que nos permiten reducir hasta en un 10% el consumo de combustible. Sobre este tema, estamos trabajando en especificaciones con capacitación de conductoras y conductores para hacer un uso más eficiente de las unidades. Eso es lo que nos queda. Va a seguir avanzando es el diésel. Cuando empezamos a hablar de otros combustibles alternativos, el objetivo es desarrollar el biometano. Un camión que funciona a gas natural puede funcionar 100% con biometano sin ningún tipo de inconveniente. Estamos trabajando muy activamente para desarrollar este combustible en la Argentina. Mientras tanto estamos haciendo crecer la flota de vehículos a gas natural, para que en el corto plazo muchas de esas unidades puedan empezar a usar biometano. Queremos un camión, un vehículo, un bus, que sean carbono neutral. Es el siguiente objetivo.
¿Cómo contribuye Scania con la industria del biometano?
El biometano es muy importante porque va de la mano del compromiso que tiene Scania de su propósito de marca, que es ser líder en el cambio hacia un sistema de transporte sustentable. Son compromisos que tenemos con el mundo, con distintas organizaciones a nivel global y nos obliga a implementar soluciones prácticas y tangibles, en cada uno de los mercados donde estamos presentes. El biometano es un combustible alternativo, es carbono neutral, no genera nuevas emisiones de CO2. Cuando empezamos a utilizar el biometano, también lo podemos comenzar a usar en cualquier proporción con el gas natural. Es una gran ventaja al momento de desarrollar un combustible alternativo.
¿Este desarrollo es el principal objetivo?
En Argentina, Scania está trabajando activamente en múltiples proyectos de producción de biometano. Articulamos mesas de trabajo, tanto con la demanda, muy fuerte de todas las multinacionales que tienen que reducir su huella de carbono y con la oferta. En el medio tenemos la forma de conectar la oferta con la demanda a través de la enorme cantidad de gasoductos y estaciones de GNC que hay en Argentina. Trabajamos activamente con los productores de biometano para alcanzar la calidad que necesitan los vehículos o la calidad necesaria para inyectar en un gasoducto. Buscamos fuentes de inversión, analizando proyectos de inversión propios y pensando en que Scania puede invertir en proyectos de producción de biometano. Al mismo tiempo trabajamos con entes públicos, con YPF, con Energas, para generar el marco normativo, que permita utilizar el biometano. Aunque ya existe y podemos utilizarlo, tratamos de ampliarlo y mejorar las condiciones de financiamiento de estos proyectos.
La tecnología avanza mucho en materia de seguridad. ¿Cuáles son las últimas novedades?
Esto aplica a cualquier producto Scania, no importa si es un camión diésel, de gas, un bus. Uno de los principales objetivos que tenemos es ofrecer el producto más seguro del mercado a nuestros clientes. Creo que lo más importante es que como líder continuamente estamos al frente en la introducción de nuevos elementos de seguridad para los conductores. Están lo que llamamos protecciones activas y protecciones pasivas.
¿Qué significan?
Cuando hablamos de sistemas de seguridad activos para los camiones, nos referimos a sistemas de control crucero, sistemas que al chofer le avisan, le dan señales de alarma si se está desviándose del carril. Sistemas predictivos que le permiten al conductor, a la conductora y al camión predecir lo que pueda llegar a pasar en el futuro, en una curva, en una loma. Hoy los sistemas de seguridad permiten que, si un camión hace constantemente la misma ruta la computadora, va aprendiendo sobre esa ruta. Entonces, en el segundo, tercer, quinto viaje, la computadora se va a adelantar a la maniobra y va a permitir acelerar, desacelerar. Es una curva más cerrada o más abierta, una subida más pronunciada o una bajada muy pronunciada, el camión va a predecir ese movimiento y va a hacer una conducción más segura en ese tramo de ruta. Y además de otros sistemas de seguridad como cámaras, sensores que pueden predecir si los conductores se están durmiendo o no, múltiples sensores que nos permiten ganar seguridad en la ruta.